Las gallinas son animales adorables y de mucho provecho para el ser humano, ya que son fuente alimenticia y ayudan a trabajar el suelo. Si usted está interesado en tener gallinas ponedoras para consumir huevos de origen casero, estos consejos le ayudarán a iniciar una correcta crianza de aves de corral.
Espacio
Lo primero que debe tener en cuenta es el espacio disponible en el hogar, el cual debe ser amplio para acondicionarse y evitar el hacinamiento de las gallinas, así como el brote de enfermedades producidas por los desperdicios de comida y excremento de las aves, los cuales pueden atraer plagas de moscas y ratones.
Si el espacio es menor a la cantidad de gallinas, con el paso del tiempo podrían generar estrés que resultaría en bajo peso y menos producción de huevos. Por tal motivo es de suma importancia recordar que, por ningún motivo, se debe sobrepoblar el espacio destinado.
Alimentación
Ya sea en cría casera o en cría comercial, la alimentación es fundamental para el correcto crecimiento y desarrollo de las aves, así como para la producción de huevos.
Las gallinas ponedoras deben recibir un alimento que se encuentre balanceado de acuerdo con su edad. Múltiples estudios demuestran que las gallinas deben consumir un alimento de producción con 17% de proteína.
Si consumen un alimento concentrado rico en maíz estarán consumiendo sustancias como las xantofilas, las cuales ayudan a una pigmentación más deseada de la yema de los huevitos.
De igual manera, la consistencia del albumen del huevo es otro elemento que indica la alimentación que está dándosele a la ponedora. “La provisión de calcio, además del fósforo, son elementos que contribuirán a la salud física de las gallinas y contribuirá con la fecundación de huevos de alta calidad”, afirman los expertos.
Se recomienda siempre construir un nido, ya sea de madera, con paja o aserrín, para que las gallinas se sientan cómodas para poner los huevos y en su período de empollar, el cual dura 21 días.
A continuación los cuatro tipos de gallinas ponedoras que existen:
1. Isa Brown: Conocida como ponedora de los huevos de oro, se adapta a todos los climas y condiciones ambientales y puede poner hasta 500 huevos al año.
2. Ponedora Blanca: Una de las más comunes es de plumas blancas y cola larga, fue creada en Estados Unidos a partir de gallinas importadas de Italia en 1835.
3. Cuello pelado: Se caracterizan por un cuello rojo y sin plumas. Son de temperamento agradable y vigorosas. Sus huevos son morenos y resisten altas temperaturas.
4. Campera: Son las hermanas de los pollos camperos de engorde, tienen un gran potencial genético y también son criadas para su consumo.
