Aprende a ser buen cuidador sin que afecte tu salud

En muchos hogares los hijos terminan cuidando a su madre o padre de edad avanzada, es una responsabilidad que según experto le pasa factura a quien con amor cuida

  • 18 feb 2022

¿Qué pasa cuando los padres envejecen y los hijos se convierten en sus cuidadores?Aunque no siempre ocurre, en muchos casos los papás se vuelven dependientes y son sus hijos quienes deben hacerse cargo de ellos, lo que puede desencadenar problemas familiares y de salud en los cuidadores.

Para reflexionar sobre esta situación y brindar herramientas para enfrentarla mejor, la gerontóloga Bárbara Diego recomienda en sus conferencia el libro “Padre de mis hijos, ¿padre de mis padres?” de Graciela Zarebski.

”Estas conferencias vna dirigidas a personas de la mediana edad, hombres y mujeres que nos toca empezar a hacernos cargo de nuestros padres debido a alguna enfermedad”, dice Diego, quien dirige el centro especializado en atención a adultos mayores.

”Cuando eso sucede, los hijos nos podemos ver muy confrontados y muy angustiados, y pasar por una crisis en donde la pregunta es ¿ahora me toca a mí ser el papá de mi papá o la mamá de mi mamá?”.

Lo que suele ocurrir, amplía, es que la dependencia viene acompañada de una crisis familiar entre los hijos porque el cuidado consume mucho tiempo, recursos y esfuerzo.Y la labor recae sobre una sola persona, quien no elige dicha labor.

”Esta persona que emerge como la cuidadora principal, empieza a sobrecargarse. De hecho, hay síndromes que están diagnosticados”, explica.

“Empieza a dejar de lado su vida personal, sus proyectos, sus sueños por tener que cuidar”.

No busco dar consejos sobre cómo cuidar a los papás, aclara. Sino invitar a una reflexión profunda en donde se propone trabajar en la visión personal del envejecimiento para así transitar el cuidado de los padres.

El libro “Padre de mis hijos, ¿padre de mis padres?”, de la escritora argentina Graciela Zarebski, reconocida especialista en temas del envejecimiento en América Latina, ”te invita a la reflexión de tu futuro y a la vez, si estás en situación de cuidar a tu mamá o a tu papá, también te da un norte de cómo sobrepasar la crisis”, detalla Diego.

Exorta también a los jóvenes a prepararse para estos momentos y además, es un llamado a que los adultos planeen su envejecimiento.