Las comunidades internacionales de diseño y los amantes del color organizados por Pantone, la institución más respetada en el ramo, han elegido que el tono del año será el “peach fruzz” (Pantone 13-1023), acogedor y cálido, asociado a la empatía y la conexión con el mundo.
Así, tanto en moda como en decoración y arquitectura, este color, suave y aterciopelado, situado entre el rosa y el naranja, actúa como catalizador sensorial que provoca bienestar y paz.
“Con el color Pantone del año 2024 vemos un mayor enfoque en las comunidades y las personas de todo el mundo que replantean cómo quieren vivir y evalúan lo que es importante: que es la comodidad de estar cerca de aquellos a quienes amamos.
“Es un color cuyo cálido y acogedor abrazo transmite un mensaje de compasión y cuya sensibilidad une a las personas y enriquece el alma”, dijo Laurie Pressman, vicepresidenta del Pantone Color Institute.
Así, en un mundo que busca reflexión, calma y paz, este color transmite serenidad y busca nutrir el mundo interior, y no solo el exterior.
“Se busca un color así para encontrar momentos de calma, creatividad humana y productividad en un mundo que presenta muchos retos, hay que vestirse en esta gama”, expresó Mónica Bravo, especialista en imagen, quien agregó que este tono es particularmente favorable para los latinos.
“Al buscar un tono que refleje nuestro deseo innato de cercanía y conexión, optamos por un color radiante. Es un tono que resuena con compasión y combina de manera natural lo juvenil con lo eterno”, comentó Leatrice Eiseman, directora ejecutiva del Pantone Color Institute.
¿Cómo se elige?
Está seleccionado por 40 líderes de tendencias de todo el mundo, inmersos en las tendencias visuales y artísticas. Se examina el color en el cine, la moda, la TV, el arte, el diseño web, la decoración de interiores y la inteligencia artificial.
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