Un avión de la compañía Atlantic Airlines que transportaba 36 pasajeros y que había salido del aeropuerto Golosón de La Ceiba y se dirigía a la isla de Gran Caymán, tuvo que regresar a la terminal aérea, luego de detectarse fallas en el tren de aterrizaje derecho.
Los desperfectos fueron captados en pleno vuelo, justo cuando faltaban aproximadamente 15 minutos para llegar a la isla, a las 12.01 del mediodía, por lo que se notificó a los pasajeros que debían volver a Honduras.
Percance
El jefe regional de Aeronáutica Civil, Ángel Ovidio Aguilar, brindó los detalles del caso, en el cual por fortuna no hubo pérdidas humanas ni daños materiales al avión.
La aeronave Boeing 737-200, con registro hondureño, reportó a los controladores aéreos que su tren de aterrizaje derecho se había dañado, ya que no se activaba, por lo que se declaró la emergencia de forma inmediata.
En el aeropuerto los servicios de socorro actuaron de forma inmediata; los bomberos jugaron un papel importante, pues estuvieron atentos ante cualquier emergencia.
“Antes del aterrizaje una nave de la base aérea salió para verificar la posición de los trenes de aterrizaje, pero gracias a Dios se logró llegar al aeropuerto sin mayores problemas”, dijo el funcionario.
Temor
Los relatos de los viajeros coinciden en las plegarias que se hacían a Dios para que el aterrizaje no ocasionara una tragedia, mientras otros reclamaban el por qué se tuvo que salir si había un problema.
“No debimos salir si había un desperfecto, desde el momento que detectaron eso lo hubieran cancelado, pero nos arriesgaron sin ponerse a pensar en que peligraban nuestras vidas”, dijo la pasajera Denia Bush. María Blanco, de origen nicaragüense, relató que en sus rezos le pidió a Dios que le diera fortaleza al piloto del avión para que todo saliera de la mejor manera.
“Tenía mucho miedo, le pedíamos a Dios que no pasara nada malo y él nos escuchó en la súplica”, dijo. “Fue algo raro y curioso saber que uno está arriba y saber que no había seguridad para bajar”, dijo el beliceño Carlos James.
“Estábamos muy asustados cuando dijeron que habían problemas en el avión, las damas se quitaron los zapatos para cuando llegara el momento del aterrizar salir corriendo, fue un momento de miedo, además pensábamos que podíamos caer al mar y que los tiburones nos iban a comer”, cito la ciudadana de origen costarricense, Ana Espinoza.
Sin esclarecer
Se intentó en reiteradas ocasiones conocer la versión de los representantes de la línea aérea, pero informaron que estos estaban en reuniones; nunca respondieron.
Recorrido
El vuelo sale de La Ceiba hacia la isla de Gran Caymán todos los viernes, llevando un total de 36 pasajeros a bordo, según se supo.