Un hombre que salía de una cantina rumbo a su vivienda fue atacado por tres sujetos, quienes lo hirieron con machetes hasta dejarlo casi muerto para luego raptar a su esposa e hija de tres años.
La trágica historia de Ramón Mejía, 41, empezó cuando se encontraba en un expendio de bebidas alcohólicas a una cuadra de su hogar en la colonia 6 de Mayo del sector Rivera Hernández, quien al salir del lugar se dirigió a su vivienda y fue atacado por tres personas frente a su esposa y su pequeña hija, a las que los agresores raptaron llevándoselas en un vehículo turismo, con vidrios oscuros.
El hecho ocurrió alrededor de las siete de la noche del miércoles y hasta ayer se desconocía el paradero de Rosa Reyes y la niña de tres años, las personas raptadas.
El cadáver de Mejía quedó destrozado en varias partes; sus brazos cercenados y su rostro cortado casi irreconocible; en su espalda y abdomen también recibió machetazos.
Minutos después de ser agredido, Mejía quedó moribundo y fueron sus vecinos los que lo auxiliaron para trasladarlo al Mario Catarino Rivas para tratar de salvar su vida.
Testigos relataron a los agentes de la Policía que se hicieron presentes al hospital, que tres individuos desconocidos se habían llevado a la señora y a la niña con rumbo desconocido.
Mejía labora como guardia de seguridad para una empresa dedicada a ese negocio. Tenía al menos unas quince machetazos, resaltando las de los brazos y su rostro, ya que su paladar quedó hendido, su lengua partida y su boca desfigurada.
La Policía investiga los hechos; sin embargo, se desconoce el paradero de la mujer y la niña.