El ganadero Dagoberto Noriega, 43, fue liberado ayer por la Policía Preventiva a las cinco de la tarde en la colonia Las Anonas en un operativo dirigido por el subcomisionado Rafael Escobar Espino y el comisario Marden Romero.
Noriega había sido secuestrado a las diez de la mañana cerca de la Villa Olímpica por varios individuos que, tras interceptar su vehículo, un Suzuki negro, lo llevaron en él a una casa de esa colonia en el sector sureste.
En esa vivienda lo estaban torturando para sacarle información de su familia y sus bienes cuando lo rescató la Policía, que también capturó a uno de sus secuestradores, identificado como Virgilio Santos.
La acción policial ocurrió gracias a la denuncia de los vecinos que llamaron para avisar que en esa casa estaban golpeando a una persona.
La vivienda, sin número y desprovista de muebles, era alquilada por el detenido.
De acuerdo a la información suministrada por los vecinos, en la casa entraban y salían cuatro individuos armados con pistolas automáticas y con aritos en las orejas, lo que hace suponer a la autoridad que podría tratarse de una pandilla de mareros.
Santos admitió que alquilaba la casa por tres mil lempiras mensuales, pero aseguró que lo obligaron los demás secuestradores a cuidar a Noriega. El ganadero fue encontrado sangrante y adolorido a causa de los golpes que le propinaban sus plagiarios, por lo que fue trasladado a una clínica privada del barrio Medina.
Su esposa, que llegó a acompañarlo al darse cuenta de lo sucedido, se negó a dar declaraciones.
El detenido fue llevado a la posta del grupo antisecuestros y anoche mismo presentado al fiscal de turno y luego ante el juez que le dio detención judicial.