'Yo vi cuando mató a mi hijo”: padre de niño asesinado

Tocoa, Colón

“Se hubiera tocado el corazón, porque él también tiene hijos”. Con esas palabras entre el llanto y la indignación, Leydi Karina Rodríguez trataba de comprender la muerte de su pequeño hijo Erwin Edilson Gutiérrez Rodríguez (de 7 años), a manos de un hombre que sin ningún escrúpulo le disparó el recién pasado domingo en la colonia Primavera, de Tocoa, Colón.

El niño fue atacado a balazos cuando iba a buscar unos amiguitos para invitarlos a la escuela dominical que se imparte todos los domingos en la Sala Evangélica de esta colonia. Muchos sectores de Tocoa no asimilan la tragedia, que inició con una discusión entre el padre del pequeño y un vecino identificado por las autoridades policiales como Selvin Reynieri Hernández Solís.

Doloroso último adiós en Tocoa para el niño asesinado de 7 años

“Yo venía para donde una cuñada a dejar una medicina y de paso a comprar agua y refresco, y me encontré con el individuo (Selvin Reynieri). Le rocé la llanta de su bicicleta con la mía, y por ahí empezó el problema”, relató Eliseo Gutiérrez, padre de Edilson.

Cuenta que en ese momento él (Selvin) quiso sacarse la pistola; pero no andaba. “Yo por defensa propia me tiré sobre él y lo herí. Porque yo pensé que se me iba a tirar, pero no, él se balanceó y se tiró por unos cercos, se metió a la casa y sacó la pistola.

Mi niño iba a la casa de él a invitar a un hijo suyo y un sobrinito para que fueran a la escuela dominical, en eso él venía saliendo y le disparó con la mano izquierda a mi niño”. “Él me amenazaba con la pistola que me acercara, yo salí corriendo. Yo vi cuando lo mató, no pude ir a recoger a mi niño, fue mi esposa que lo recogió”, expresó el padre entre la impotencia de no haber podido defender a su vástago.

Foto: La Prensa Vecinos y compañeritos del menor le dieron el último adiós.

Gutiérrez confesó que hace unos seis meses un hermano del sospechoso lo amenazó de muerte por cosas que él aún sigue sin saber. “Éramos vecinos, solo 20 metros nos separaban. Yo solo lo conocía como Selvin, mi hijo se llevaba bien con los niños de él”, agregó Gutiérrez, quien por temor tuvo que velar a su hijito en el barrio San Isidro.

Edilson estudiaba el segundo grado en la escuela José Cecilio del Valle de este barrio; todos los días su padre lo traía hasta aquí en bicicleta desde la colonia Primavera.

“Cuando lo traía en la bicicleta, él siempre me decía que cuando estuviera grande iba a trabajar para comprarme un carro y que nos iba a sacar adelante”, recuerda su progenitor. En su velatorio y sepelio, alumnos y docentes de la escuela llegaron para darle su último adiós.

“Estamos consternados, es una noticia muy difícil por la forma en la que él murió. Esto es aborrecido por todo el pueblo de Tocoa y los que conocimos al niño”, lamentó Allan Martínez, director de la escuela José Cecilio del Valle.