29/04/2024
06:13 AM

‘Mi hijo apenas estuvo una hora solo en la casa’: madre de Jairo

Santa Bárbara, Honduras.

En medio del llanto y del dolor de toda una comunidad fue sepultado ayer Jairo Bú, el niño de siete años que sufría una discapacidad física y a quien encontraron muerto en su humilde vivienda en la comunidad de Ceibita Sur en Santa Bárbara.

El cortejo fúnebre lo encabezaban Miriam Castellanos y Rollin Bú, los padres del pequeño, quienes estaban devastados.

Miriam tuvo que ir a la montaña a cortar café para ganarse unos lempiras y darles de comer a sus hijos; su compañero de hogar está recluido en el presidio de Santa Bárbara.

Vecinos de la comunidad relataron que el pequeño Jairo estuvo encerrado cuatro días en su casa y murió de hambre; sin embargo, Mirian asegura que dejó a su hijo solo unas horas y bajo el cuidado de su madre.

“Salí el sábado a las cinco de la mañana. Lo dejé con mi mami. El niño estaba vivo y por la tarde me avisaron que estaba muerto y me vine a pie”, explicó la mujer entre el llanto. A su lado estaba su compañero de hogar, a quien le dieron permiso en el presidio para ir a sepultar a su hijo. “Estamos mal; nunca esperamos esto. Me siento muy triste al ver la situación en que murió mi niño y no estar libre para salvarlo”, dijo Rollin Bú.



Estaba enfermo

La vida del pequeño Jairo fue de sacrificios. Desde que nació el pequeño pasó postrado, no caminó, nunca habló, apenas balbuceaba para llamar la atención de sus parientes. Varias veces fue internado en el hospital de Santa Bárbara por el deterioro de su salud.

“Estuvo ingresado por una desnutrición severa en este hospital. Se le dio el tratamiento, pero por los costos que implicaba estar lejos de su casa la madre nos pedía que se lo diéramos para cuidarlo”, explicó una enfermera del centro asistencial de Santa Bárbara.

La madre del niño asegura que la preeclampsia que sufrió durante el embarazo de Jairo ocasionó todos los problemas de salud que el pequeño tuvo en sus siete años de vida.

“Nació producto de una preeclampsia. Lo dejé solo por necesidad. No tengo a nadie que me ayude. Tenía que buscar el dinero para darles de comer a los niños. Jairo apenas una hora se quedó solo porque a las seis de la mañana mi mamá llegaba a cuidarlo y fue cuando lo encontró muerto”, aseguró la mujer, a quien le sobreviven dos hijos.