Las operaciones efectuadas por la Fiscalía Especial Contra el Crimen Organizado, mediante la Dirección de Lucha Contra el Narcotráfico, DLCN, y la Policía Nacional Preventiva, continuaron ayer en el laboratorio donde elaboraban cocaína con el inicio del desmantelamiento del local.
Las autoridades competentes, luego de ser apoyados por un equipo de técnicos especialistas en la materia, de Colombia, viajaron hasta la montañosa zona para destruir lo encontrado en el predio.
La operación que comenzó alrededor de las 12:00 del mediodía tenía como finalidad extraer los equipos confiscados para ser trasladados hasta San Pedro Sula y allí realizar otras diligencias del caso.
Instalaciones
Empleados de la Empresa Nacional de Energía Eléctrica, ENEE, acompañaron al equipo de la Fiscalía para hacer los trabajos de desmantelamiento del narcolaboratorio.
Unos 2,000 pies de cables quitaron los técnicos distribuidos entre la casa y el laboratorio, donde se encontraron varias conexiones para focos, tomas de corriente, interruptores, calentadores y cajas de registro que estaban unidas desde los generadores de energía.
Para los empleados estatales los artículos utilizados en las instalaciones tienen altos precios en el mercado, pues según ellos, los cables usados y otras cosas son de la mejor calidad.
Los generadores de energía eléctrica, calentadores y otros aparatos pesados serían cargados por militares del Ejército que llegaron desde la capital industrial en calidad de apoyo en un camión de las Fuerzas Armadas.
Pese a el mal estado del trayecto, los equipos se presentaron para evitar volver en otras ocasiones y hacer las inspecciones y otras pruebas pendientes de las evidencias.
Trabajadores armados
Al mismo estilo que los laboratorios colombianos de procesamiento de droga, los empleados del encontrado en la aldea Cerro Negro, portaban sus armas de manera visible, según pobladores, quienes afirman que cada uno de ellos se transportaba en vehículo cuatrimoto con hasta dos armas cortas en su cintura.
“Lo que nunca escuchamos fueron disparos y estas personas eran bien raras en su forma de vestir y de hablar”, dijo un vecino que por seguridad omitió su nombre.
También mencionó que nunca vieron aterrizar helicópteros en un supuesto helipuerto.
“Lo que tenemos aquí es una canchita de fútbol donde jugamos partidos contra equipos de aldeas cercanas y aquí sólo dos veces han llegado helicópteros; la primera fue hace 25 años, cuando los de Hondutel instalaron una antena y la otra fue la semana pasada cuando vino el ministro Óscar Álvarez con su gente”, mencionó el residente.
Entre las al menos 20 personas que laboraban en el laboratorio había dos mujeres, de acuerdo con los comentarios de otros vecinos, asegurando la belleza de las féminas que se presume se encargaban de lavar ropa y cocinarle a los demás empleados.
La fabricación del estupefaciente requería el transporte del mismo y se presume que utilizaban automotores con doble tracción que también fueron decomisados la semana pasada.
Los tres automóviles están averiados; uno de ellos con el motor inservible y los otros con daños en la dirección, que según testigos, permanecieron abandonados en diferentes partes de la calle.
Esa gente llegó a la aldea desde inicios de noviembre del año pasado y la última vez que se vieron en el lugar fue la semana del 31 de diciembre, desde ese día desaparecieron y dejaron abandonado todo”, afirmó otro residente.
Informe de expertos
El informe detallado de las inspecciones sería entregado ayer por un equipo de colombianos que viajaron a hacer varias pruebas, sin embargo, los resultados de pruebas serían enviados de manera electrónica en los próximos días a la Secretaría de Seguridad.
Una de las primeras indicaciones que los expertos en narcotráfico giraron a las autoridades nacionales fue que se destruyera la procesadora, donde aseguraron basándose en las inspecciones que el equipo instalado entre el bosque estaba hecho para fabricar al menos 500 kilos de cocaína semanales.
El vocero del Ministerio Público, Elvis Guzmán, señaló que “una vez culminada la inspección se marcharán del país con el único compromiso de hacer llegar desde Colombia el informe, con copias para la Fiscalía General y Secretaría de Seguridad para que ellos en su oportunidad determinen acciones contra los presuntos sospechosos del manejo del laboratorio”, dijo.