La fiscal Francia Sophía Medina ya pasó su segunda noche recluida en la Penitenciaría Nacional Femenina de Adaptación Social (PNFAS), después de que en la audiencia de declaración de imputado una jueza le dictara detención judicial.
La fiscal ingresó el jueves a las 8:00 pm al edificio del Poder Judicial y para evitar ser captada por las cámaras se tapó el rostro con un suéter, no llevaba aros de seguridad, por lo que se ocultó entre los elementos de la Agencia Técnica de Investigación Criminal (Atic), la audiencia finalizó pasada la media noche de ayer viernes.
Con los datos personales proporcionados por la imputada le leyeron sus derechos y le informaron sobre los hechos de la acusación, situación que llevó a la Fiscalía a formular sus conclusiones pidiendo tanto la secretividad como privarla del derecho de la libertad.
La Jueza de Letras Penal con Jurisdicción Nacional decretó la secretividad en base a las consideraciones planteadas por el ente fiscal y ante la gama de tipos penales, las consideraciones de hecho y de derecho, el peligro de fuga y la capacidad para interferir en la continuidad de las diligencias de investigación, determinó que dicha imputada cumpla el término de ley bajo la guarda en la cárcel de mujeres ubicada en la aldea de Támara, Municipio del Distrito Central, departamento de Francisco Morazán.
Acusaciones
Medina es acusada de los delitos de lavado de activos, abuso de autoridad y sustracción, destrucción, ocultación o inutilización de documentos en custodia, según un comunicado del Ministerio Público de Honduras.
Según la acusación, la agente fiscal extrajo más 88 millones de lempiras (evidencias en dólares) del Banco Central de Honduras.
La fiscal realizó los retiros en los últimos dos años, pero desde julio de 2023 solicitó incapacidad. Pese a su incapacidad médica por problema de estrés, hizo otros dos retiros de dinero. Por el mismo caso el Ministerio Público investiga a otros dos fiscales, según informaron fuentes internas del ente acusador
