Tres hombres y una mujer fueron acribillados tras ser requeridos por falsos policías que mantenían un retén en la zona del desvío a Las Minas, en un supuesto registro de armas que se realizaba en el lugar.
Las víctimas son Rafael Antonio Hidalgo Niño, 28, Orlin Ernesto Dubón Rodríguez, 28, Claudino Martínez Pérez, 27, y Ana Luisa Dubón, esposa de Hidalgo Niño, 26. Todos originarios de La Entrada, Copán.
El cuádruple crimen se suscitó a la una de la tarde en la comunidad de Mezcalito, hasta donde fueron llevadas las víctimas luego de ser detenidas por los uniformados.
La Policía presume que el móvil del hecho está ligado a la venganza, aunque a las víctimas las despojaron de una camioneta Four Runner gris en la cual se trasportaban a San Pedro Sula a traer unos vehículos a una agencia.
Horas después la camioneta apareció en el kilómetro 45 en el desvío de la aldea Mandinga, a unos seis kilómetros antes de llegar a Quimistán.
Los cuerpos de investigación maneja como hipótesis más fuertes que las muertes están relacionadas con una venganza dirigida a Rafael Hidalgo Niño, alias 'El Fay,' quien hace algunos meses salió del presidio sampedrano, donde estuvo acusado de varios delitos.
'El ataque iba dirigido hacia Hidalgo por la forma como los ejecutaron. Se presume que es una venganza', confirmó Santos Rodríguez Flores, jefe de la Policía en Santa Bárbara.
Los familiares de los cuatro muertos fueron los primeros en llegar a la escena, ellos acusaron a la Policía de ser los responsables de estas muertes.
Reciben llamada
Familiares de los muertos dijeron que a eso de las 12.15 del mediodía recibieron una llamada de parte de Ana Dubón, cuando daba aviso que habían sido interceptados por la Policía.
'Ella dijo que unos policías los habían detenido por andar un arma de fuego, una escopeta, pero que no andaban los documentos. La joven les confió que sospechaba que no eran agentes de seguridad por la forma fuerte en que les hablaban', dijo un pariente que no se identificó.
Todos los familiares que se presentaron se mostraban herméticos y no permitieron que las autoridades enviaran los cuerpos para realizar la autopsia a Medicina Forense en San Pedro Sula.
Uno de los parientes que llegó al lugar contó a las autoridades que minutos antes de ser ejecutados, los malhechores le permitieron hacer otra llamada a la familia y escucharon cuando les disparaban.
Los torturaron
Según los familiares, los homicidas trasladaron a los cuatro prisioneros hasta el lugar llamado La Balastrera. Allí les habrían disparado y les habrían hecho creer que podían huir, pero al final los mataron.
El médico forense dictaminó que los cuerpos de los tres hombres presentaban signos de torturas como choques eléctricos, también estaban atados con 'chachas parecidas a las que utiliza la Policía Nacional'; sin embargo, el fiscal Ventura Amador dijo que los inmovilizadores que los delincuentes utilizaron son comerciales y no forman parte de la Secretaría de Seguridad. 'Son esposas comerciales las que andaban, se nota a simple vistas', afirmó el fiscal.
Las víctimas tenían múltiples disparos de armas calibre de 9 milímetros y Ak-47.
El levantamiento de los cadáveres se realizó a las tres de la tarde e inmediatamente su familia retiró los cuerpos para el velatorio en su lugar de origen.
Antecedentes
Rafael Hidalgo Niño era considerado por la Policía como uno de los cabecillas de la principal banda dedicada al robo de vehículos en La Entrada, Copán.
El pasado 8 de junio de 2007 había sido capturado por elementos de la Dgic de San Pedro Sula y Copán en su vivienda en el barrio El Progreso, por orden de captura librada por el Juzgado de Santa Bárbara.
él fue puesto en libertad, bajo medidas sustitutivas, en octubre de 2007. Cuatro meses después de su captura.
