28/04/2024
02:25 AM

Capturan a supuesto secuestrador de empresario

Dani Mauricio Ponce Medina, originario de La Villa de San Francisco, habría participado en el secuestro de Elias Francisco Canales Carbajal

Francisco Morazán, Honduras

Dani Mauricio Ponce Medina fue capturado este viernes por la Unidad Nacional Antisecuestros de la Policía Nacional por suponerlo responsable del delito de secuestro en perjuicio de un empresario en la aldea Cofradía del municipio de Cantarranas, Francisco Morazán.

El detenido, de 47 años de edad, originario de La Villa de San Francisco, habría participado en el secuestro de Elias Francisco Canales Carbajal, y por quien exigieron la cantidad de dos millones de lempiras a cambio de su liberación.

Elias Francisco Canales Carbajal fue rescatado sano y salvo después de permanecer seis días en cautiverio.

”Yo solo lo cuidaba”

“Yo participé, yo lo cuidé... solo lo cuidaba”, confesó Dani Ponce cuando era trasladado al centro de la Dirección Policial de Investigaciones (DPI), donde será llevado su proceso.

Dani Ponce fue detenido tras una orden judicial, emitida por el Juzgado de Letras Penal el 09 de mayo del año pasado, tras suponerlo responsable del delito de secuestro agravado en perjuicio de un empresario de 55 años de edad.

Al momento realizar la detención, el sospechoso se hizo pasar por su hermano, con quien tiene similitudes físicas, algo que utilizaba a favor para evadir la justicia, por lo que se le ampliará un requerimiento fiscal por el delito de usurpación de la personalidad de otro.

El secuestro ocurrió el 22 de febrero del 2023, cuando el empresario capitalino, de 55 años, se dirigía a una de sus propiedades en Cantarranas, donde varios hombres fuertemente armados, lo interceptaron y lo privaron de su libertad.

Una vez secuestrado, los sospechosos contactaron a los familiares de la víctima para exigirles dos millones de lempiras por su liberación.

La Dirección Policial de Investigaciones (DPI) tras varios días de búsqueda y rastreo, logró ubicar y rescatar sano y salvo a la víctima y sin pagar ni un lempira por el rescate.