Los sampedranos han experimentado en los últimos días congestionamientos vehiculares que son un verdadero dolor de cabeza.
El problema se genera en todos los bulevares producto del no funcionamiento de semáforos, carros dañados en las vías por las altas temperaturas, otros mal estacionados y falta de educación vial.
Carmen Sánchez tiene 45 años y todos los días viaja de la colonia Fesitranh hasta su trabajo en una empresa instalada en el bulevar del sur.
“Es terrible pero en los últimos días se ha sentido peor la situación”, dijo.
Fueron declaradas de interés público luego de un documento que surgió de un foro sobre la vialidad en SPS. Siglo 21 construye 24, pero todavía queda la mitad pendientes.
El parque vehicular de San Pedro Sula es de aproximadamente 350,000 vehículos, entre carros y motos, pero con el ingreso de comerciantes y visitantes esa cifra casi se duplica a diario.
“La ciudad ha crecido igual que el parque vehicular y como salimos del desfase en infraestructura la situación cambió, pero aún hace falta”, dijo el exgerente de obras públicas, Ramón Medina. El análisis es compartido por el directivo del Consejo para el Desarrollo en la Zona Metropolitana del Valle de Sula, Osmín Bautista.
“El parque vehicular va en aumento. No hay forma que la ciudad pueda expeditar el flujo que se genera de un parque vehicular de más de 350,000 vehículos y a eso súmele que somos una ciudad tránsito, los que vienen a trabajar a la ciudad de todo el valle de Sula causa un tráfico intenso y estaríamos arriba de unos 500,000 vehículos en horas de trabajo”.
Forman es el parque vehicular que se ha manejado siempre en la ciudad, pero a esta cifra debe sumarse al menos 300,000 unidades que ingresan por trabajo y negocios.
“La ciudad no tiene la capacidad, no va al ritmo de lo que está demandando el incremento de ese parque vehicular, las obras que debieron haberse construido hace años se están haciendo hasta ahorita. Siglo 21 está haciendo obras, pero todavía no terminan y cuando termine, todavía va a quedar un rezago de más de 30 obras que no se han ejecutado, entonces, siempre vamos a tener problemas y el parque vehicular cada día sigue creciendo”, dijo.
En los dos años anteriores no se experimentó embotellamientos porque la reactivación de la economía tras la pandemia se dio de manera pausada.