Organizaciones y gobiernos locales, desarrollaron el foro regional por el Bienestar de la Niñez y Adolescencia y Juventud, con el objetivo de promover asistencia y protección, a estos grupos sumamente vulnerados.
Wilmer Vásquez, director ejecutivo de la Coordinadora de Instituciones Privadas por las Niñas, Niños, Adolescentes, Jóvenes y sus Derechos (Coiproden), dijo que el objetivo es analizar la situación de la niñez y adolescencia, la inversión, pero sobre todo buscar un mecanismo que permita una mayor coordinación para asistir a hondureños en estos grupos de edad.
Causas
Algo cuestionado por los asistentes, es la falta de interés estatal en generar políticas para la protección y orientación de la infancia y juventud, pues el Instituto de la Juventud, posee uno de los montos más pequeños en el presupuesto nacional, con 20 millones, cifra paupérrima para poder realizar acciones.
Vásquez dijo que preocupa el alto índice de muertes violentas que se da contra niños y adolescentes, pues el Observatorio Nacional de la Violencia, maneja que el 55% de muertes violentas corresponde a personas menores de 30 años de edad, algo contradictorio, pues se ha dado dentro del régimen de excepción, que buscaba reducir los índices.
Asimismo detalló que desde 2014 a la fecha 110 mil adolescentes y jóvenes han sido deportados hacia Honduras.
“A pesar de los esfuerzos del gobierno actual para el acceso a la educación, los estudiantes siguen viendo la opción de migrar”, comentó.
El experto señaló que más del 43% de los desplazamientos internos en Honduras corresponden a menores de edad.
Juan Enamorado, representante del Congreso Nacional de Juventudes de Honduras, dijo que es necesario ampliar el presupuesto del Instituto de la Juventud, porque ese monto apenas llegan 9 lempiras a cada joven, pero al quitar la carga administrativa, al final son 3 lempiras para un año de trabajo para cada joven, y eso es preocupante en un contexto de violencia y disfunción familiar