Cada vez son más los jóvenes sampedranos que debido a la falta de oportunidades en el campo laboral deciden abrir sus propios negocios, aún con el miedo de fracasar en el intento de luchar por una mejor calidad de vida.
Y es que de acuerdo con estimaciones nacionales, en el país se ha perdido en el último año al menos 500,000 empleos y más del 50% de la población hondureña devengan menos del salario mínimo, además, cerca del 60%
de los puesto de trabajos generados en Honduras están en la informalidad.
Pero estas circunstancias no han sido obstáculos para quienes han demostrado que con esfuerzo y dedicación se pueden lograr grandes cosas. Un ejemplo de esto es el joven Alejandro Guardado, quien decidió abrir una empresa de diseño y decoración de eventos de todo tipo.
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El emprendedor, que también es pasante universitario de la carrera de Marketing, es todo un soñador y creativo microempresario, virtudes que lo ha llevado a conquistar San Pedro Sula y Tegucigalpa a través de sus fabuloso montajes.
Enfocada en otro área, pero siempre con el objetivo de salir adelante, está Iveth Melédez Taverino, quien comenzó su propia escuela llamada IICA Business School para la enseñanza de temas relacionados con el marketing, la publicad y ventas.
Taverino ofrece en su escuela diplomados especializados en negocios, entrenamiento bajo métodos prácticos, workshops internacionales, consultorías en diagnóstico de necesidades de capacitación y soluciones corporativas diseñadas a la medida. Todos los cursos y talleres son impartidos bajo la modalidad virtual.
“Podemos cubrir cualquier evento”: Alejandro Guardado
Este joven que también es pasante universitario de la carrera de Marketing es todo un soñador y creativo microempresario.
Su negocio busca preparar eventos con buena calidad y sobre todo buen gusto. “Estamos capacitados para cubrir cualquier tipo de evento y fiesta temática”, asegura Guardado.
Su mayor reto ha sido lograr que los clientes confíen en su marca. A comenzó con su proyecto desde que tenía 22 años, muchas personas creían que por ser tan joven, su trabajo no quedaría bien. Ahora se siente orgulloso de lo lejos que ha logrado llegar.
“Nuestro negocio nació en pandemia”: arleen y arianna
“Nuestro negocio nació a raíz de la pandemia, comenzamos a vender comida a nuestras amistades, de repente surgió la necesidad de acompañar esas comidas con una bebida, se comenzó a vender jugo de limón, en eso nuestra hija mayor Arianna me comentó que sería bonito ir a vender jugos al lugar donde solemos ejercitarnos, el bulevar de los caminantes en Los Andes”, comparte Rodríguez. Madre e hija dicen que desde ese momento se dedicaron a buscar restaurantes que les permitieran vender sus jugos naturales y por el momento se encuentran en dos lugares.
“Es difícil salir adelante en Honduras, pues hay que hacer triple sacrificio para que los frutos salgan, pero con la fe puesta en Dios, toda lucha, desvelo es para bien, por mis hijas, por mi familia a quien amo con todo mi ser”, finaliza la emprendedora del jugo Arleen.
“No estaba en mis planes empezar”: iveth meléndez
Su escuela de negocios se llama IICA Business School y en ella ofrece diplomados virtuales especializados en negocios, diversos entrenamientos bajo métodos prácticos, workshops internacionales, consultorías en diagnóstico de necesidades de capacitación y soluciones corporativas diseñadas a la medida.
“Hice todo lo que se necesitaba para formalizar mi pyme e iniciamos a operar en una home office en San Pedro Sula y en Tegucigalpa en el 2020, así fue como nació mi escuela IICA Business School.
Fue en medio de la pandemia, no estaba en mis planes empezar, pero dado un infortunio que sucedió en mi salud y mi empleo anterior, lo vi como una oportunidad para poner en marcha ese proyecto en el que había estado trabajando durante algunos años”, agrega la joven de 34 años que reside en la Capital Industrial.
“Dios nos da fortaleza para seguir”: edgardo lópez
“Muchas veces hemos pensado en rendirnos, hemos tenido muchos altibajos, pero siempre nos da valor y fuerza, hay que buscar apoyo y pedirle ayuda a Dios”, aconseja la pareja a los nuevos emprendedores que tienen la intención de comenzar su negocio.
El Nopal cuenta con un menú de muy variado que va desde hamburguesas, alitas, asados, parrilladas, sus famosas piñas locas y otros famosos cocteles.