San Pedro Sula, Honduras.- El nuevo ciclo escolar ya comenzó y la mayoría de centros de enseñanza han retomado sus clases presenciales, siempre tomando en cuenta todas las precauciones contra el covid-19, virus que aún se mantiene latente.
Una buena alimentación ayuda a tus hijos no solo a reforzar sus defensas sino también a mantenerse más alerta en sus clases.
Un refrigerio escolar saludable es aquel que proporciona una fuente extra de energía a niños y adolescentes, útil para concentrarse y aprovechar al máximo el conocimiento.
Los expertos sugieren planearlo con tiempo, que sea sencillo, no se descomponga si está a temperatura ambiente, se empaque en recipientes reutilizables y que para su elección se involucre a los pequeños.
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Échales un vistazo a estos cinco consejos que te brindamos para que los tengas en cuenta cuando pienses y prepares la merienda de tus hijos...
1. Debe tener una porción de fruta (un puño) y verduras frescas (dos palmas de la mano ahuecadas); ambas, de temporada. El 44 por ciento de los niños del mundo no cuenta con esto.
2. No olvides las oleaginosas (maní, soja o pistacho) y leguminosas (frijoles, lentejas, garbanzos y habas) en tu preparación, pueden ser un acompañamiento.
3. Súmale un alimento con bajo contenido en grasa, con proteína y cereal integral, como quesadilla con chimol, un mollete o sándwich de huevo.
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4. Se recomiendan de seis a ocho vasos al día de agua simple y un máximo de dos vasos de agua de frutas con menos de una cucharadita de azúcar en cada uno.
5. Dile “no” a los productos que tengan sellos octagonales con alerta de exceso de calorías, azúcares, grasas saturadas, grasas trans o sodio; y los embutidos.
¿Sabías que..? Además de desnutrición y obesidad, los niños tienen riesgo de padecer “hambre oculta”, que es la carencia de vitaminas y otros micronutrientes esenciales, que atentan con el desarrollo y la inmunidad.
