La Organización de Estados Americanos (OEA) instó este lunes al presidente hondureño, Juan Orlando Hernández, y al opositor Salvador Nasralla, a llegar a un acuerdo para la revisión de actas y verificar supuestas irregularidades en las elecciones, para superar así la crisis en el país por sospechas de fraude.
'El único camino posible para que el pueblo hondureño pueda aceptar y (...) reconocer ganador en este proceso electoral, es que se llegue a un acuerdo entre los principales candidatos', declaró el jefe de la misión de observadores de la OEA, el expresidente boliviano Jorge Quiroga, al presentar un informe preliminar.
Hernández se proyecta como el vencedor de las elecciones celebradas el domingo 26 de noviembre tras un conteo de votos que finalizó la madrugada del lunes, sin que el Tribunal Supremo Electoral (TSE) haya proclamado un ganador, mientras la oposición denuncia un supuesto fraude.
Quiroga señaló que ambas partes deben acordar el cotejo de 5.173 actas electorales, en las cuales el partido de Nasralla, la izquierdista Alianza de Oposición Contra la Dictadura, asegura que estuvo el 'fraude'.
'El estrecho margen de los resultados así como las irregularidades, errores y problemas sistémicos que han rodeado esta elección no permiten a la misión tener certeza sobre los resultados', afirmó Quiroga.
Con 99,96% de las actas contadas, Hernández, derechista de 49 años, aparece al frente con el 42,98% de los votos mientras Nasralla, un popular presentador de televisión, obtiene el 41,39%.
El presidente del TSE, David Matamoros, dijo que la entidad completó el conteo de votos pero que falta subir a su sistema de cómputo las últimas 18 actas del proceso.
El jefe de misión de la OEA también pidió a los lideres políticos que evitaran discursos que lleven a manifestaciones violentas, y solicitó a las fuerzas de seguridad que respetaran los derechos humanos, tras varios choques con manifestantes.
Quiroga lamenta, además, 'la pérdida de vida humana' durante las manifestaciones de la última semana que dejaron una joven muerta, y espera que se lleve ante la justicia a los responsables del hecho.