03/12/2025
02:51 PM

La Biosfera
del Río Plátano

    El principal pulmón vegetal con que cuenta Honduras, ubicado en los departamentos de Colón y Gracias a Dios, entre los ríos Paulaya, Sicre, Plátano y Patuca y el mar Caribe, con una superficie de 350,000 hectáreas, la mayor reserva de Centroamérica, declarado Patrimonio de la Humanidad por la Unesco en 1982, se encuentra severamente deforestado por la creciente expansión de ganaderos y madereros, los primeros talando bosque para convertirlo en pastizales, los segundos comercializando maderas preciosas sin contar con la debida autorización por parte del Instituto Nacional de Conservación Forestal.

    Así, el hábitat milenario de compatriotas pech, tawahkas y misquitos, con vestigios arqueológicos: petroglifos, pictografías, está cada vez más amenazado por la presencia de invasores mestizos procedentes de otras regiones del país. Igual suerte depara a la diversidad de especies animales y vegetales de dicha zona.

    Una noticia alentadora para detener y revertir su eventual destrucción por la acción depredadora la constituye el proyecto Mi Biosfera, integrado por la alianza ICF, Fundación para el Desarrollo Empresarial Rural (Funder), Secretaría de Recursos Naturales y Ambiente (Serna), Universidad Nacional de Agricultura y Ganadería, Universidad Agrícola Panamericana, con respaldo financiero por parte de la Unión Europea.

    Previamente a esta iniciativa conjunta, la Cooperación Alemana al Desarrollo donó millones de euros para su preservación.

    Entre los objetivos se encuentran estos: fortalecer la gestión del paisaje y gobernanza del territorio, fomentar los enfoques de cadenas de valor de ganado y café, con cero deforestaciones, establecer e implementar mecanismos financieros inclusivos para el clima, restablecer áreas forestales degradadas, estudiar aspectos climáticos, de biodiversidad y medios de vida, promoviendo buenas prácticas de manejo.

    Las Fuerzas Armadas, por medio del Comando de Apoyo al Manejo de Ecosistemas y Ambiente y el Primer Batallón de Protección Ambiental, está estrechamente colaborando con las instituciones estatales y privadas arriba mencionadas, combatiendo delitos ambientales y conexos: tala ilegal, tráfico de fauna silvestre en peligro de extinción, agricultura y ganadería extensiva, apropiación ilícita de tierras y desplazamiento de tribus autóctonas.

    Es de esperar que esta iniciativa obtenga resultados altamente positivos, para lo cual es necesario involucrar a los pueblos originales, que son y han sido desde siempre los que han preservado el equilibrio hombre-naturaleza, de generación en generación, comprendiendo que de su preservación depende su supervivencia y la de sus culturas. ¡Salvemos la Biosfera del Río Platano! cuando aún es posible, pero el tiempo inexorablemente avanza y solamente el respaldo de toda la nación podrá hacer realidad este urgente llamado, tal vez la última oportunidad de rescatarla antes de que sea demasiado tarde.