10/10/2024
02:20 PM

Lo único seguro

Salomón Melgares Jr.

En relación con el coronavirus se dicen muchas cosas. La información está viajando tan rápido que hasta abruma. Por ejemplo, hace poco estaba leyendo que internacionalmente ya se está hablando de una supuesta culpabilidad de China, pues al parecer, al mero inicio del brote del virus en sus tierras le dijo al resto del mundo que este no se esparcía por medio del contacto humano. Sin embargo, cuando ya Italia y algunos otros países estaban atestados de contagios, dijo, simplemente, que se había equivocado.

Por otra parte, algunos especulan que las cosas volverán a la normalidad en julio, siendo optimistas, pero que con seguridad será en agosto. Y otros nos comunican que el plasma de los sobrevivientes está siendo utilizado para combatir el virus en aquellos más débiles, y que estos, los sobrevivientes, van a poder decir yo conozco a un familiar o un amigo que murió por el virus. Qué de esto es verdad o un acierto y qué es mentira o una equivocación, no lo sabemos, el tiempo lo dirá.

Lo que sí sabemos, o al menos podemos llegar a saber con plena certeza, creo yo, es que la pandemia es una oportunidad, una nueva oportunidad de voltear nuestros ojos a Dios. Me decía una amiga el otro día: “Yo aquí luchando con mi niña porque de repente apareció con fiebre y nariz tapada, aquí la ando en mis brazos mientras se sienta mejor. Necesito a Dios en mi corazón, esta situación me hace ver que somos tan vulnerables y que lo único seguro es Dios”.
Y luego completó: “Aquí es donde nos damos cuenta el tipo de persona que estamos siendo y vemos que la casa, el carro, dinero o buena posición no significan nada en un trance como este, y es una sacudida para que veamos atrás y analicemos qué tanta importancia le hemos dado a Dios”.