Hugo Chávez ha dejado limpio el camino para su tercera reelección en las presidenciales de 2012 tras vencer ayer el bloque gubernamental las elecciones legislativas celebradas en Venezuela.
Según las estimaciones manejadas por La Prensa al cierre de esta edición, cuando todavía no existían datos oficiales, los diputados chavistas serán mayoría en la nueva Asamblea Nacional. Todo el país esperaba con impaciencia la lectura del primer boletín del Centro Nacional Electoral, CNE, cuando ya se contaban varias horas desde el cierre de los colegios electorales.
Los líderes de ambos bandos se encontraban reunidos en sus cuarteles generales en espera los datos. Pero el ministro de Información, Andrés Izarra, había convocado a los seguidores de Chávez frente al balcón del Palacio de Miraflores, habitual escenario para las fiestas de la victoria del Partido Socialista Unido de Venezuela, PSUV. “¡Pa Miraflores!”, gritó Izarra en su Twitter.
Precisamente fue esta red de microblogging el escenario donde se dirimieron distintos pulsos por obra y gracia del silencio oficial. Datos y recuentos se cruzaban con arengas y exabruptos.
Las calculadoras echaban humo, sabedoras de que la ley electoral impuesta por el anterior Parlamento, adonde reinó el chavismo tras el boicot de la oposición en 2005, multiplicaría los votos del oficialismo. Chávez necesitaba 110 diputados -2/3 partes de la Cámara- para legislar a su antojo las leyes fundamentales del Estado. Pero incluso se conformaría con 99 -3/5 partes-, mayoría con la que podría convocar una Ley Habilitante para gobernar por encima de los diputados.
Según las estimaciones avanzadas por el propio líder de la Revolución Bolivariano, habría votado el 70% de los venezolanos convocados para ello, todo un récord para la historia parlamentaria del país.
Reacciones
El ex oficialista Ismael García, diputado y candidato a la reelección, exhortó a los testigos de la oposición en las mesas auditables que se queden “hasta el último minuto y cuiden los votos que han costado mucho sacrificio” a esa tendencia política, contraria al socialismo del siglo XXI preconizado por el presidente Hugo Chávez.
“Nunca hemos dicho que no vamos a reconocer los resultados de las votaciones”, afirmó García, y resaltó la importancia de cotejar los resultados que el CNE va a anunciar con los que se encuentren en las actas sometidas a auditoría o verificación.
La presidenta del Consejo Nacional Electoral, CNE, Tibisay Lucena, dijo a la prensa que, como estaba previsto, comenzó el cierre de mesas a las 18 horas -22.30 GMT-, aunque “la votación continuará mientras se encuentren electores o electoras por sufragar”.
Lucena elogió el proceso y manifestó que se estaba desarrollando con normalidad y con una masiva participación.
“En todo el territorio nacional solamente cinco mesas -automatizadas- pasaron a manual... ésa es una noticia extraordinaria, consideramos que el sistema electoral, nuestra plataforma tecnológica funcionó”. Desde antes que comenzara a las seis de la mañana la jornada electoral de doce horas se observaban largas filas de votantes. En total funcionaron 36,773 mesas de votación.
Cuando faltaba poco más de una hora para que cerraran las mesas de votación, Caracas aparecía llena de ciudadanos que mostraban con orgullo sus meñiques derechos pintados de morado.