Un 'error humano' pudo ser la causa de la muerte de una quincena de niños sirios tras una campaña de vacunación contra el sarampión a en una zona rebelde del norte del país, indicó este jueves la oposición.
Una investigación preliminar de la Coalición Nacional descubrió que a los menores les fue dado atracurio en lugar de una solución utilizada en las vacunas contra el sarampión.
Los niños fallecidos el martes tenían entre seis y 18 meses. Sus padres inicialmente acusaron a las autoridades de salud de la oposición de no almacenar las vacunas adecuadamente o de usarlas una vez caducadas.
La Coalición Nacional, por su parte, dijo que sospecha de una 'violación de la seguridad por parte de unos vándalos vinculados al gobierno del presidente sirio Bashar al Assad'.
Médicos detenidos
El gobierno interino de la oposición 'pidió la detención del conjunto del equipo que participó en la campaña de vacunación', indicó, y que está compuesto por voluntarios sirios que trabajan con la oposición.
Este gabinete ya había dado instrucciones para detener la segunda ronda de vacunaciones contra el sarampión, que había comenzado el lunes, tras la muerte de 15 niños.
El Observatorio Sirio de Derechos Humanos (OSDH) dio cuenta este jueves de la muerte de otro niño, elevando la cifra hasta 16.