El ayatolá Hosein Ali Montazeri, quien fue sucesor designado del imán Jomeini para asumir la dignidad de Guía Supremo de la República Islámica antes de convertirse en figura muy crítica del régimen, murió el sábado en Qom, a los 87 años de edad.
El fallecimiento se debió a una enfermedad, señalaron las agencias de prensa iraníes.
Montazeri, un teólogo respetado, fue uno de los líderes de la revolución islámica de 1979 y estuvo entre los artífices de la Constitución de la República Islámica. Considerado miembro de la corriente más liberal y progresista del clero, manifestó su oposición al endurecimiento progresivo del régimen contra los opositores. El fundador de la República Islámica, el ayatolá Jomeini, lo apartó del poder antes de fallecer en 1989.
Las autoridades, temerosas de su influencia, le impusieron arresto domiciliario en la ciudad santa de Qom durante 14 años.