Un juez emitió ayer una orden de arresto para Lindsay Lohan después de que la actriz reconoció haber dado positivo en un examen antidrogas.
Lohan, de 24 años, podría volver a la cárcel si se determina que violó su libertad condicional. La actriz no pasó la prueba antidrogas menos de un mes después de que fuera dada de alta de un tratamiento de rehabilitación de tiempo completo. Al emitir la orden de aprehensión en Beverly Hills, el juez del tribunal superior Elden Fox también revocó la libertad condicional de Lohan en su caso por abuso de drogas de hace tres años.
Pero la orden fue postergada y Lohan seguirá libre a la espera de una audiencia en el tribunal el viernes, de acuerdo con funcionarios de la Corte Superior del Condado de Los Ángeles.
Fox había amenazado a Lohan con 30 días de cárcel por cada violación a su libertad condicional. Ahora debe decidir si la enviará a prisión o a un nuevo tratamiento para rehabilitarse. La actriz deberá estar presente en la audiencia.
Se dejó un mensaje al abogado de Lohan, Shawn Chapman Holley, sin recibir una respuesta inmediata.
La orden fue emitida después de que Fox tomó el caso el mes pasado y presentó una opción que incluye sesiones de terapia y reuniones en grupos de adictos.
Confesión
La actriz confirmó en su página de Twitter la semana pasada que no aprobó un examen para detectar si había consumido drogas o alcohol, el cual fue ordenado por la corte.
“Desafortunadamente no pasé mi más reciente prueba antidrogas”, escribió.
“El abuso de drogas es una enfermedad que desafortunadamente no se quita de un día a otro. Estoy luchando duro para superarla”, agregó.
Lohan suele publicar sus comentarios en la cuenta que Twitter ha verificado como suya.
No se pudo determinar de inmediato por qué no fue arrestada el lunes. Se intentó establecer contacto con Allan Parachini, vocero de la Corte Superior, para conocer otros detalles sobre la orden sin obtener una respuesta inmediata.
