24/05/2025
10:15 PM

Actividad ciclónica se intensificará

Expertos en huracanes elevaron sus pronósticos sobre la cantidad de tormentas tropicales y huracanes de gran intensidad que se formarían en 2008 en el Atlántico norte, en un nuevo estudio difundido ayer.

    Expertos en huracanes elevaron sus pronósticos sobre la cantidad de tormentas tropicales y huracanes de gran intensidad que se formarían en 2008 en el Atlántico norte, en un nuevo estudio difundido ayer.

    El reconocido equipo de expertos en ciclones de la Universidad del Estado de Colorado elevó a 17 el número de tormentas tropicales con nombre que prevé para esta temporada; 9 de ellas se convertirían en huracanes, de los cuales 5 alcanzarán la categoría de huracán mayor, de enorme poder destructivo.

    Los huracanes mayores son aquellos que alcanzan las categorías 3, 4 o la máxima de 5, en la escala Saffir-Simpson que mide la velocidad y la fuerza de sus vientos, que van por encima de los 178 km/h. Los expertos dijeron que debieron elevar sus pronósticos sobre el número de tormentas y huracanes basados en las altas temperaturas de la superficie marina y los centros de baja presión observados en el Atlántico en junio y julio, combinado con la temprana actividad ciclónica vista en los trópicos.

    Sin mayores daños

    La tormenta tropical Edouard tocó tierra ayer en la costa de Texas con fuertes vientos y lluvia, pero a pesar de ello causó pocos daños.

    La tormenta entró al este de Galveston y al oeste de la frontera con Luisiana, entre el poblado costero de High Island y Sabine Pass, y comenzó a perder fuerza a medida que se adentró por tierra. Aunque los meteorólogos llegaron a temer que pudiera convertirse en huracán, por lo que las autoridades de Texas y de Luisiana adoptaron medidas de emergencia, los vientos nunca alcanzaron los 119 kilómetros por hora necesarios para esa clasificación. No se reportaron grandes daños.

    El Centro Nacional de Huracanes en Miami dijo que la tormenta seguramente perderá fuerza hoy para convertirse en una depresión tropical, con vientos máximos sostenidos inferiores a los 63 kph. Los dos aeropuertos principales de Houston, el Hobby y el Internacional Bush, funcionaron ayer por la mañana, aunque los vuelos sufrieron retrasos de entre 30 minutos y cinco horas.