Abarrotadas por turistas nacionales e internacionales permanecieron todos los días de Semana Santa los balnearios y playas de la ciudad.
La playa municipal de la colonia Los Maestros fue una de las más concurridas por los veraneantes que aprovecharon para compartir en familia. También hubo actividades artísticas de las compañías de refrescos, telefonía celular y de otros sectores del comercio.
La cuenca del río Cangrejal fue visitada por los turistas amantes de la naturaleza y los deportes extremos como el canopy y el rafting, así como quienes prefieren la tranquilidad de los hoteles de montaña. Se estima que durante la semana ingresaron más de siete mil personas en estos lugares.
El regreso masivo
A Villa Becerra, que cuenta con playa y cabañas cerca del río, llegaron, sólo el Jueves Santo, unas quince mil personas.
Los controles de seguridad de la Policía Nacional Preventiva y miembros del ejército continúan en toda la ciudad y en las principales carreteras, informó el subcomisionado de policía Luis Bustamante.
El regreso a casa de los veraneantes ha empezado, aunque el aeropuerto el sábado permanecía desolado por la poca cantidad de pasajeros. Se espera que la mayoría ingrese este día. La estación de los ferry que viajan a Roatán y Utila estaba repleta.
“Muchos turistas han preferido viajar en yate en y no en avión a Roatán debido a que les resulta más económico; por la cantidad de veraneantes que se encuentran en la isla se están haciendo tres viajes diarios que trasladan a 450 personas cada uno”, dijo Rodolfo Solomón.
Los días de mayor movimiento en esta temporada son sábado, domingo y lunes, cuando regresa la mayor parte de los viajeros originarios de distintas partes del país, aunque en esta ocasión un significativo número procede de Guatemala, Estados Unidos y Europa.
Carlos Martínez, nativo de San Pedro Sula, que viajó con su familia desde la norteña ciudad, aseguró que disfrutó su estadía en Playa Perú, que encontró limpia y atractiva, “la comida no estaba cara y la atención es de calidad”.