La imparable destrucción a la que es sometida la montaña Mico Quemado debido a la tala y las quemas de los agricultores ha llevado a varias ONG a interesarse en orientar a éstos para que implementen nuevos métodos en el cultivo de árboles frutales y maderables.
Dos de esas organizaciones que ya iniciaron la labor son la Fundación Ambiental de Protección de la Reserva, Fundemique, y Tecnoserv; su personal ya comenzó a reunirse con los campesinos que han producido la tierra por muchos años sin orientación técnica.
Carlos Escobar, presidente de Fundemique, manifestó que ya es hora de tomar acciones para contrarrestar en parte el daño en ese pulmón natural de los progreseños.
“Creemos que si educamos a los productores sobre la forma en que deben sembrar sin la necesidad de quemar estaremos dando un gran paso en la protección de la montaña”.
En 1994, el Congreso Nacional declaró zona de reserva ecológica al Mico Quemado mediante decreto 144-94, con 28,500 hectáreas.
Lamentablemente, el documento sigue engavetado y las autoridades no le han dado su valor al permitir el daño ambiental, pues a diario en la zona se ve cómo los agricultores queman las parcelas para sembrar granos básicos.
El ambientalista dijo que como no se ha observado ningún avance en la protección del bosque por parte de los organismos del Gobierno, se han visto en la necesidad de iniciar un programa de orientación a los vecinos sobre cómo deben cultivar sin dañar el ambiente.
“Hay una variedad de árboles que dan fruto y protegen la reserva, entre éstos están el cacao, que ya se da en el sector pero en mínima escala y descuidado; en estos momentos ya iniciamos capacitaciones técnicas para que los dueños de terrenos amplíen ese rubro, que aparte de tener buena aceptación en el mercado, ayudará al ambiente”, manifestó.
Roger Mejía, técnico de Tecnoserv, dijo que lamentablemente las personas que tienen algunos sembradíos los han cultivado sin ningún conocimiento.