Los comerciantes de Santa Lucía, que desde ayer cobran en bitcóin (BTC), aclararon que siempre emitirán una factura por la venta de productos y servicios y le transferirán al Gobierno el impuesto sobre venta (ISV).
El BTC, aunque es llamado “moneda” virtual, no es visto por los comerciantes de este municipio de Francisco Morazán como un instrumento de cambio, como el lempira o el dólar, pues no está considerado por las leyes nacionales como moneda oficial.
“Una de las cosas que promovemos es que todas las transacciones sean realizadas dentro del marco de la ley, que los comercios emitan las facturas y paguen los impuestos. Promovemos la tributación, pues lo que queremos es afianzar la economía”, dijo Rodrigo Guerrero, director de Decentral Academy, una de las organizaciones que impulsa el proyecto Bitcoin Valley en Santa Lucía.
Ayer, después de haber recibido varios meses de capacitación sobre el BTC, alrededor de 60 comerciantes oficializaron el uso de la criptomoneda en cualquiera de las transacciones.
Los comerciantes, por medio de un POS o la aplicación BitPos, le cobrarán a la persona que desee pagar con fracciones de bitcóin equivalentes al precio en lempiras.
Hasta ahora, en Honduras no existe un marco que regule el uso de criptomonedas, sin embargo, no está prohibido su utilización como medio de pago, tampoco, como un activo virtual objeto de inversión en plataformas de compañías que cotizan en la bolsa de Estados Unidos, como Coinbase (COIN) en el Nasdaq.
“Esta es la nueva tecnología, es la innovación y Honduras no se puede quedar atrás. Nosotros vamos a comenzar a cobrar también en bitcóin a las personas que quieran usarlo”, dijo Carlos Salgado, propietario de Helados Santa Lucía.
Los dueños de Helados Santa Lucía, un negocio familiar fundado hace unos 24 años, que vende minutas de diferentes sabores a L70, no ven el “bitcóin como una moneda, es solo un medio de pago, como las tarjetas de crédito”.
Carlos, por ejemplo, al vender una minuta en satoshis procesará la transacción a través del POS o BitPos que proveerá la empresa Coincaex. Él no recibirá los satoshis de BTC, sino lempiras, y sobre la cantidad vendida tendrá que descontar el ISV.
Las organizaciones que impulsan el BTC en Santa Lucía, Blockchain Honduras, Decentral Academy, Coincaex y la Universidad Tecnológica de Honduras (UTH) buscan además con esta tecnología aumentar el número de turistas que llegan a este destino.
Carlos Pagoada, director de Blockchain, dijo que “Santa Lucía es un proyecto piloto que también le puede servir al Gobierno, a la Comisión Nacional de Banca y Seguros para conocer y aprobar leyes, ya que el país no tiene”.
“El Gobierno puede ser parte del proyecto como observador. Muchas alcaldías nos están llamando porque quieren saber más de bitcóin”, dijo.
“No debemos ser los últimos”: Roger Triminio, fundador de Avenida Crypto
Tarde o temprano tenía que llegar a Honduras la utilización del bitcóin. Nos habíamos tardado mucho en reaccionar cuando El Salvador ya se metió de lleno.
En Honduras aún estamos en pañales, y creo que las acciones que están tomando son importantes porque vienen de la empresa privada. Esto le está poniendo un ultimátum al Estado, ¿de qué manera?, deben de ponerse al tanto de esta tecnología.
El Gobierno no le está prestando la atención que se necesita; sin embargo, la empresa privada lo está haciendo. Cuando logramos entender los beneficios que tiene el bitcóin sabemos que afecta las finanzas tradicionales, ya que cuando se hacen transacciones de bitcóin se hacen de persona a persona, no necesitan intermediarios. Mientras la ley no prohíba la utilización del bitcóin no hay problema, sería un error de parte del Estado prohibirlo.
El bitcóin es descentralizado, y aunque se prohíba se pueden hacer las transacciones. Estados Unidos no prohíbe las criptomonedas, sino las regula, ahora se pagan impuestos de ganancias de criptomonedas. Honduras debe buscar la manera de adoptar esta tecnología, no podemos ser los últimos, subirnos al tren de la innovación.
