La Escala Básica de la Policía Nacional de Honduras anunció la suspensión de labores a nivel nacional a partir de este lunes, como medida de presión ante el incumplimiento en el pago de salarios y otros beneficios laborales, según informaron en un pronunciamiento público.
Los agentes señalaron que la decisión, conocida como “brazos caídos”, se mantendrá de manera indefinida mientras no se les cancelen las obligaciones económicas pendientes, las cuales aseguran afectan directamente la estabilidad de sus familias.
Entre las principales demandas figuran el pago de los sueldos mensuales atrasados, dos meses del bono de alimentación, vacaciones acumuladas y el desembolso completo del bono navideño, compromisos que —según denuncian— permanecen en mora.
Los policías manifestaron que la falta de respuesta por parte de las autoridades ha profundizado la crisis financiera que enfrentan, al tiempo que consideran insostenible continuar con sus funciones sin recibir sus ingresos de manera oportuna.
En el pronunciamiento también se denuncia una marcada desigualdad dentro de la institución policial, al señalar que mientras la base enfrenta carencias económicas, altos mandos ya habrían recibido pagos extraordinarios.
De acuerdo con la denuncia, miembros de la cúpula policial y autoridades del sector seguridad habrían percibido incentivos adicionales y bonos especiales, lo que —a criterio de los agentes— evidencia una brecha de privilegios y falta de equidad dentro de la institución.
Los policías hicieron un llamado a la equidad, subrayando que quienes patrullan las calles y arriesgan su vida diariamente tienen las mismas necesidades que quienes ocupan cargos administrativos y de dirección.
Asimismo, recalcaron que su compromiso con la ciudadanía se mantiene, pero advirtieron que sin salarios dignos ni pagos puntuales resulta imposible cumplir de manera efectiva con su deber constitucional.
Los agentes cuestionaron la planificación y ejecución del presupuesto destinado a la Policía Nacional y exigieron soluciones inmediatas que permitan restablecer sus derechos laborales y la normalidad en el servicio policial.