Tegucigalpa, Honduras.
Autoridades de la Dirección de la Niñez, Adolescencia y Familia (Dinaf) exteriorizaron ayer su preocupación por el comercio sexual en las redes sociales que ahora envuelve a menores de edad, por lo que plantearon medidas más duras y efectivas para prevenir e interrumpir estas prácticas.
Lolis Salas, titular de la Dinaf, indicó que además de constituirse como una figura delictiva en la legislación penal vigente en el país, es una grave amenaza a los derechos de la niñez involucrada en estas prácticas; por lo tanto, compromete al Estado y a la sociedad a tomar acciones.
Reconoció que la niñez es altamente vulnerable a este tipo de actos punibles, los cuales en los últimos años ha proliferado debido a la expansión de los servicios y medios informáticos y electrónicos que limitan la capacidad de supervisión del Estado. Manifestó que es necesario fortalecer la investigación criminal y la persecución penal de toda persona independientemente de su nacionalidad que procure los servicios sexuales de niñas y niños, reduciendo la impunidad y los casos que permanecen en el anonimato por la pobre capacidad de denuncia.
Asimismo, lograr la plena aplicabilidad de la legislación penal vigente a fin de que toda persona responsable de la comisión de delitos que atenten contra la integridad y la libertad sexual de niñas y niños sean sometidas a un sistema de justicia expedito.
“Hay que impulsar la investigación científica junto con la academia, a fin de desenmarañar el fenómeno de la prostitución infantil, comprendiéndolo desde sus aristas sociales, culturales, económicas, sicológicas y estructurales; permitiendo dar respuestas focales y sostenibles, orientadas a atacar las causas del problema y el impacto en la población afectada”, detalló. Conjuntamente, desarrollar un mecanismo articulado de detección de casos a fin de interrumpir el inicio y permanencia de niñas y niños en la actividad sexual con fines comerciales. Lo anterior se puede hacer coordinando acciones en el área de educación, comunicación y la promoción de estilos de vida saludables.
Autoridades de la Dirección de la Niñez, Adolescencia y Familia (Dinaf) exteriorizaron ayer su preocupación por el comercio sexual en las redes sociales que ahora envuelve a menores de edad, por lo que plantearon medidas más duras y efectivas para prevenir e interrumpir estas prácticas.
Lolis Salas, titular de la Dinaf, indicó que además de constituirse como una figura delictiva en la legislación penal vigente en el país, es una grave amenaza a los derechos de la niñez involucrada en estas prácticas; por lo tanto, compromete al Estado y a la sociedad a tomar acciones.
Reconoció que la niñez es altamente vulnerable a este tipo de actos punibles, los cuales en los últimos años ha proliferado debido a la expansión de los servicios y medios informáticos y electrónicos que limitan la capacidad de supervisión del Estado. Manifestó que es necesario fortalecer la investigación criminal y la persecución penal de toda persona independientemente de su nacionalidad que procure los servicios sexuales de niñas y niños, reduciendo la impunidad y los casos que permanecen en el anonimato por la pobre capacidad de denuncia.
Asimismo, lograr la plena aplicabilidad de la legislación penal vigente a fin de que toda persona responsable de la comisión de delitos que atenten contra la integridad y la libertad sexual de niñas y niños sean sometidas a un sistema de justicia expedito.
“Hay que impulsar la investigación científica junto con la academia, a fin de desenmarañar el fenómeno de la prostitución infantil, comprendiéndolo desde sus aristas sociales, culturales, económicas, sicológicas y estructurales; permitiendo dar respuestas focales y sostenibles, orientadas a atacar las causas del problema y el impacto en la población afectada”, detalló. Conjuntamente, desarrollar un mecanismo articulado de detección de casos a fin de interrumpir el inicio y permanencia de niñas y niños en la actividad sexual con fines comerciales. Lo anterior se puede hacer coordinando acciones en el área de educación, comunicación y la promoción de estilos de vida saludables.
