'Es nuestra protectora y confiamos en ella y en su gracia', expresó Rosa Zúniga, docente del instituto María Auxiliadora, donde se celebró ayer el Día de la Virgen del mismo nombre.
Para la educadora y todo el estudiantado, el 24 de mayo es una fecha conmemorativa, de fiesta y regocijo cristiano.
'Este día tiene un realce especial porque se lo dedicamos a la Virgen, que es nuestro auxilio', comentó Zúniga.
Añadió que ella -la Virgen- es motivo de inspiración de la fe y el amor de la feligresía.
Por ello, alumnas, docentes y padres celebraron lo que consideran la mayor fiesta de la familia salesiana, es decir, la congregación fundada por San Juan Bosco.
Por generaciones
El ambiente fue de mucha alegría. Las enseñanzas religiosas se transmiten de generación en generación.
Tanto las ex alumnas del instituto como las niñas de preescolar conocen el significado de la celebración.
'Hoy es el Día de la Virgen María Auxiliadora y estamos alegres', expresó Erly Guadalupe Pineda, de cinco años.
La pequeña forma parte del grupo a cargo de Bertha Lidia Portillo, una ex alumna que se ha convertido
Mientras degustaban de una paleta, estas pequeñas de preescolar cantaron 'En el cielo hay una estrella' en honor a la Virgen.
Ella lleva tres años como catedrática del centro educativo.
'Esta celebración significa un crecimiento a través de valores y mensajes evangélicos', dijo.
Festejos
La gran fiesta de la comunidad católica inició a las 5.30 de la mañana.
Durante todo el día se realizaron diferentes actividades como la eucaristía, dramatizaciones y cantos. 'Nuestra misión educativa es infundir el deseo en las jóvenes de imitar a María en sus virtudes', dijo sor Marina Méndez, educadora de la institución.
Cada grupo presentó su flor en honor a la Virgen.
Además se llevó a cabo media hora de adoración por la paz del mundo y de Honduras.
La solemne misa fue a eso de las 5.30 de la tarde con la participación de cientos de feligreses católicos.<