Comayagüela, Honduras.
Bastan unos pocos minutos de lluvia para que la capital deje al descubierto su vulnerabilidad. Ayer en horas de la tarde, un fuerte aguacero causó desbordamiento de la quebrada El Sapo, que en consecuencia provocó inundaciones en los mercados de Comayagüela.
Desde los mercados Las Américas, Colón, San Isidro, Álvarez, hasta el puente Carías, los más de 60 milímetros de agua que cayeron dejaron una acumulación de agua que le llegaba hasta la cintura a los comerciantes.
Al menos 1,500 puestos ubicados en ambos lados de la calle, a inmediaciones del Ministerio de Educación, fueron anegados y dañados por el sedimento y agua.
Recuento de daños
Resultaba asombroso observar cómo los productos en venta se confundían con la gran cantidad de basura que era arrastrada por las corrientes de aguas lluvias.
Los vendedores hicieron esfuerzos para que sus mercancías no se echaran a perder, lo que resultó en vano, pues fue poco lo que al final se logró rescatar.
“Lo perdimos todo, no tenemos qué vender para hoy, todo se lo llevó el agua con la inundación”, declaró la vendedora de verduras Gertrudis Soto.
Los sistemas de drenaje y tragantes obstruidos por la basura fueron los principales detonantes de la emergencia que se reporta en la zona de los mercados.
Pese a las constantes inundaciones en este sector, ha sido imposible que tanto vendedores como compradores adopten una actitud de aseo y depositen la basura en su lugar.
Antes de las 2:00 pm, 10 cuadrillas de las Microempresas de Barrido de la Alcaldía Municipal y equipo conformado por volquetas, cargadoras, tres tanques de agua, entre otras, fueron trasladadas a esta zona para la limpieza.
Dagoberto Padilla, encargado de las Microempresas, informó que fueron retiradas de los mercados no menos de 20 toneladas de basura, entre llantas, botellas de plástico, desperdicios de verduras.
“Con la ayuda de elementos del Ejército hemos dejado limpios estos sectores, hasta se alquiló una planta eléctrica para trabajar por la noche”, detalló Padilla.
El estancamiento de agua paralizó el motor de un bus de la ruta urbana que quedó atrapado en medio de la séptima avenida. Fue hasta las 2:15 pm que se logró destapar un tragante para sacar el agua del sector.
Bastan unos pocos minutos de lluvia para que la capital deje al descubierto su vulnerabilidad. Ayer en horas de la tarde, un fuerte aguacero causó desbordamiento de la quebrada El Sapo, que en consecuencia provocó inundaciones en los mercados de Comayagüela.
Desde los mercados Las Américas, Colón, San Isidro, Álvarez, hasta el puente Carías, los más de 60 milímetros de agua que cayeron dejaron una acumulación de agua que le llegaba hasta la cintura a los comerciantes.
Al menos 1,500 puestos ubicados en ambos lados de la calle, a inmediaciones del Ministerio de Educación, fueron anegados y dañados por el sedimento y agua.
Recuento de daños
Resultaba asombroso observar cómo los productos en venta se confundían con la gran cantidad de basura que era arrastrada por las corrientes de aguas lluvias.
Los vendedores hicieron esfuerzos para que sus mercancías no se echaran a perder, lo que resultó en vano, pues fue poco lo que al final se logró rescatar.
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 Diez cuadrillas fueron trasladadas a la zona.
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Los sistemas de drenaje y tragantes obstruidos por la basura fueron los principales detonantes de la emergencia que se reporta en la zona de los mercados.
Pese a las constantes inundaciones en este sector, ha sido imposible que tanto vendedores como compradores adopten una actitud de aseo y depositen la basura en su lugar.
Antes de las 2:00 pm, 10 cuadrillas de las Microempresas de Barrido de la Alcaldía Municipal y equipo conformado por volquetas, cargadoras, tres tanques de agua, entre otras, fueron trasladadas a esta zona para la limpieza.
Dagoberto Padilla, encargado de las Microempresas, informó que fueron retiradas de los mercados no menos de 20 toneladas de basura, entre llantas, botellas de plástico, desperdicios de verduras.
“Con la ayuda de elementos del Ejército hemos dejado limpios estos sectores, hasta se alquiló una planta eléctrica para trabajar por la noche”, detalló Padilla.
El estancamiento de agua paralizó el motor de un bus de la ruta urbana que quedó atrapado en medio de la séptima avenida. Fue hasta las 2:15 pm que se logró destapar un tragante para sacar el agua del sector.
 Las aguas arrastraron sedimento y basura.
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