San Pedro Sula, Honduras.
Con apenas cinco días de haber nacido, la madre de los trillizos ya identifica las personalidades de cada uno de los pequeños.
Los padres aún no deciden los nombres que les pondrán.
“Uno es como enojado y si escucha ruido arruga la cara; otro es un poco inquieto, se mueve bastante y estira sus bracitos y piernitas; el último es el más tranquilo de los tres, duerme bastante y no le afecta que sus hermanitos estén inquietos o llorando”, manifestó emocionada Erika Marilú Castellanos, madre de los bebés.
Desde el martes, los niños tenían extendida el alta para ser llevados a casa, pero la madre tuvo fiebre la noche después del alumbramiento y se quedó en observación. No obstante, ya los cuatro están aptos para salir del hospital hoy.
Samuel Santos, neonatólogo del hospital, dijo que desde que los niños nacieron han estado muy bien de salud, con buen apetito y que no necesitaron más de cuatro horas de oxígeno.
Apoyo
Un empresario sampedrano se solidarizó con la familia y donó la leche que los menores necesitarán durante los primeros meses de vida; pero todavía necesitan ayuda porque no tienen cómo regresar a su lugar de origen en Santa Cruz de Yojoa. El taxi les cobra L1,500 y no tienen dinero para pagarlo.
Además, necesitan pañales, ropa y una cuna. “La cama que tenemos es pequeña y no vamos a caber”, dijo la madre de cinco hijos.
Con apenas cinco días de haber nacido, la madre de los trillizos ya identifica las personalidades de cada uno de los pequeños.
Los padres aún no deciden los nombres que les pondrán.
“Uno es como enojado y si escucha ruido arruga la cara; otro es un poco inquieto, se mueve bastante y estira sus bracitos y piernitas; el último es el más tranquilo de los tres, duerme bastante y no le afecta que sus hermanitos estén inquietos o llorando”, manifestó emocionada Erika Marilú Castellanos, madre de los bebés.
Desde el martes, los niños tenían extendida el alta para ser llevados a casa, pero la madre tuvo fiebre la noche después del alumbramiento y se quedó en observación. No obstante, ya los cuatro están aptos para salir del hospital hoy.
Samuel Santos, neonatólogo del hospital, dijo que desde que los niños nacieron han estado muy bien de salud, con buen apetito y que no necesitaron más de cuatro horas de oxígeno.
Apoyo
Un empresario sampedrano se solidarizó con la familia y donó la leche que los menores necesitarán durante los primeros meses de vida; pero todavía necesitan ayuda porque no tienen cómo regresar a su lugar de origen en Santa Cruz de Yojoa. El taxi les cobra L1,500 y no tienen dinero para pagarlo.
Además, necesitan pañales, ropa y una cuna. “La cama que tenemos es pequeña y no vamos a caber”, dijo la madre de cinco hijos.