El caso de los edificios de clases 6 y 6-A de la Universidad Nacional Autónoma de Honduras, Unah, se mantiene en incógnita.
El Tribunal Superior de Cuentas, TSC, sigue sin trasladar al Ministerio Público un informe sobre una auditoría que practicó en la Unah para aclarar las irregularidades que se cometieron en la construcción de los edificios, allá por 1998, que servirían para la carrera de Química y Farmacia y otras unidades.
Según el MP el esclarecimiento del caso depende del dictamen del TSC que fue solicitado desde hace varios años y que aún no se conoce. El escándalo se originó en el periodo de la ex rectora Ana Belén Castillo en la segunda mitad de la década de los noventa.
En un inicio se licitó la construcción del edificio de clases número 6 para la facultad de Química y Farmacia por un monto de 70 millones de lempiras. La empresa favorecida fue Nacional de Ingenieros. Más tarde se amplió el contrato por 50 millones más a la misma empresa para la construcción del edificio 6-A sin haberse seguido el debido proceso. La Unah desembolsó 80 millones de lempiras y a cambio los edificios quedaron inconclusos.
Anunciado
El caso vuelve a resurgir tras el colapso del viejo edificio de la facultad de Química y Farmacia que el martes se incendió ante el estallido de al menos 600 frascos de ácidos, bases y solventes orgánicos que utilizan estudiantes y maestros para sus prácticas de laboratorio. El siniestro se hubiera evitado si la facultad hubiera sido reubicada en el inmueble que no fue terminado por supuestos actos de corrupción.
Jorge Arita, rector de la Unah, dijo, después del incendio, que los estudiantes y docentes de Química y Farmacia serían reubicados en su propio edificio una vez que se terminen los trabajos que quedaron inconclusos.
Arita aseguró que ya se tenía contemplada la inversión de otros 70 millones lempiras, a parte de los 80 millones que costaron las ruinas que hoy se encuentran en la Unah, para finalizar los edificios de clases número 6 y 6-A. “Para habilitar el edificio de Química y Farmacia se necesitan 35 millones de lempiras y ese mismo valor para el otro edificio, los fondos ya están considerados en el presupuesto”, manifestó.
Se intentó conocer la reacción de los miembros del TSC pero no estaban disponibles, sin embargo, se dijo que el informe ya se concluyó y que se encuentra en una etapa de revisión final. Olvin Rodríguez, presidente de la Junta de Dirección de la Unah, ambos edificios “deben concluirse a como de lugar porque ya es tiempo que la universidad cambie”.
Inspeccionan áreas aledañas
Tegucigalpa. El material reactivo que estalló el martes en la facultad de Química y Farmacia de la Universidad Nacional Autónoma de Honduras, Unah ha despertado la alerta, no sólo en las autoridades de Salud.
Sumado a los operativos de inspección en las seis colonias aledañas a la Unah que realizarán desde hoy técnicos de salud ambiental de la Región Metropolitana, varios estudiantes de la facultad de Medicina iniciaron desde el viernes un proceso de investigación para determinar el impacto generado por los ácidos, gases y los solventes orgánicos.
Los jóvenes se desplazaron a las colonias Hato de Enmedio, Aldea de Suyapa, Villa Olímpica, Universidad Norte, Villa Universitaria y Altos del Trapiche, con el propósito de establecer si la nube tóxica que se formó a raíz del siniestro ocasionó daños graves a la salud de niños y adultos. Los resultados se enviarán a las autoridades.
