Más de 160 presuntos indocumentados fueron detenidos ayer durante una redada en una compañía de ropa usada en una de las operaciones migratorias más grandes en Houston en casi dos años.
Los detenidos provenían de México, El Salvador, Guatemala y Honduras. Aproximadamente 60 podrían ser liberados temporalmente si tienen alguna de las llamadas cuestiones humanitarias, como necesidades especiales de salud o son responsables de la custodia de algún menor de edad.
Proceso
Tendrían que presentarse ante un juez federal de migración, que decidiría si pueden o no permanecer en el país. Casi el 70% de los detenidos son mujeres, ocho de ellas embarazadas y dos menores de edad que fueron entregados a integrantes de su familia. Cuatro empleados requirieron atención médica, incluyendo una mujer que cayó seis metros desde una pila de plataformas de madera en la que se había escondido.
Robert Rutt, agente de la Oficina de Inmigración y Aduanas, dijo que más de 200 personas se encontraban en la fábrica 'desordenada pero limpia', donde las temperaturas llegaban a '92 grados Fahrenheit y aún más' en las primeras horas de la tarde. Las llamadas hechas ayer a la compañía Action Rags USA, no obtuvieron respuestas. La redada fue la culminación de un año de investigación, dijo Rutt.
Los agentes migratorios continuarán investigando el caso para determinar si se cometieron otras violaciones, que en casos anteriores han incluido robo de identidad, contratación o albergue deliberado de extranjeros ilegales y documentación fraudulenta.