Desalojar a más de quinientos nuevos vendedores ambulantes que se han tomado las calles del centro de la ciudad será el objetivo principal de un operativo que se realizará hoy.
Las autoridades de mercados y abastos tomaron la determinación de realizar la actividad, ya que las dirigencias de las asociaciones de buhoneros y la municipalidad no pudieron controlar a los vendedores.
Entre las partes existe un acuerdo de no permitir más puestos y nuevos vendedores, pero no se ha cumplido.
El problema empeora porque a una semana de la Navidad y a dos del Año Nuevo, algunas calles se mantienen cerradas por la aglomeración de vendedores ambulantes.
Tal es el caso del tramo céntrico de la 6 calle sureste, en el barrio Concepción, así como en la 3 avenida o calle del comercio y la 1 avenida, en donde la libre circulación peatonal y vehicular es muy difícil.
Ahora son más
Hace tres semanas, en un operativo conjunto entre las autoridades, se pretendió desalojar a 200 nuevos achineros, pero sólo se procedió a la reubicación de los antiguos buhoneros en las aceras de las calles.
Sin embargo, hoy contabilizan la llegada de 300 más.
“El desalojo se realizará de manera contundente porque en esta ocasión si tienen inundadas las calles del centro de la ciudad”, indicó el jefe de abastos y mercados, Miguel Rivera.
El funcionario dijo que en la nueva aglomeración son cómplices las asociaciones de ambulantes al negociar puestos con inmigrantes, quienes aprovechan la temporada para comercializar sus productos. El superintendente Antonio Rivera señaló que ésta será la última Navidad en que los buhoneros venderán en las calles.
