05/12/2025
09:02 AM

Hay 346 presos hacinados en penal ceibeño construido solo para 180

La Ceiba, Honduras.

Tras los hechos ocurridos el sábado en el centro penal ceibeño, adonde resultaron heridos 17 reclusos al enfrentarse con militares que trabajaban en una inspección en las bartolinas, se pone nuevamente en el tapete la necesidad de reubicar el recinto por inseguro, ya que además está en el pleno centro de la ciudad.

También las instalaciones son una bomba de tiempo y no son apropiadas para un reclusorio. En un principio el sitio fue concebido para albergar a 180 reos; sin embargo, en la actualidad es ocupado por 346 reclusos. Hay una sobrepoblación del 100%.

“Es necesario que al centro penal se le vaya buscando una nueva ubicación, un nuevo proyecto para poder sacarlo porque donde se encuentra no reúne las condiciones de seguridad, tanto para los internos como para las personas que residen en los alrededores”, manifestó el jefe departamental de la Policía, subcomisionado Miguel Amaya Amador.

Clamor

Ya son muchas las ocasiones que las autoridades municipales, así como la ciudadanía en general, han solicitado la reubicación del centro penitenciario. Se ha propuesto construir una cárcel en los predios donde se encuentra la granja penal de El Porvenir, ya que hay suficiente espacio para trasladar a los reos.

La ciudadanía ceibeña percibe que ha faltado voluntad de las autoridades gubernamentales para gestionar los fondos.

“Hemos tocado ese tema de la reubicación del penal con el presidente Juan Orlando Hernández y no hay ninguna acción. Nos pronunciamos y les pedimos a los diputados y al alcalde para que gestionen al Gobierno y remuevan el presidio. Se han descuidado, los diputados deberían presionar para meter los fondos en el presupuesto del Congreso Nacional”, apuntó Francisco Villatoro, presidente de la Cámara de Comercio de Atlántida.

Otro de los problemas que se suman a los muchos que hay en el reclusorio es lo fácil que es ingresar droga y otros objetos prohibidos. Los familiares de los presos que llegan como visita son registrados minuciosamente, igual que lo que llevan; pero las autoridades sospechan hasta de los custodios.

Tanta es la desconfianza que no se informó de los operativos del sábado al jefe del penal, Wilfredo Duarte, supuestamente para que no hubiera fuga de información y alertaran a los presos.