Más de 100,000 garífunas hondureños viven en Estados Unidos, país al que tuvieron que emigrar obligados por la falta de oportunidades de empleo y desarrollo que hay en Honduras.
Ahora las remesas son la principal fuente de sustento en las comunidades garífunas, en las cuales aún muchos se dedican a pescar o la agricultura, pero los ingresos que generan esos rubros no se comparan para nada con lo que representan los ingresos de dólares que vienen desde el extranjero.
Luther Castillo, miembro de la Organización Fraternal Negra Hondureña (Ofraneh), dijo que los garífunas emigran para tratar de sacar adelante a sus familias.
“La falta de oportunidades laborales existentes en el país obliga a la comunidad garífuna a emigrar. Uno de los puntos de emigración más fuerte es Estados Unidos, desde donde se envía remesas a los familiares”, manifestó Castillo.
“Hablando de dinero, las remesas desde el extranjero constituyen la principal entrada de dinero en la economía de las comunidades del pueblo garífuna. Después vienen rubros como la agricultura y la pesca, pero las remesas es lo principal”, recalcó.
Castillo dijo que el mismo fenómeno de migración masiva que viven los garífunas es el que afecta a varios sectores de la población hondureña en general.
Por su parte, Faustino Castillo, de la comunidad garífuna de Barra Vieja, Tela, dijo que en esa zona la dependencia de las remesas es casi total.
“Es difícil vivir solo de la pesca, eso apenas da para comer. Aquí la mayoría de familias tiene para comer gracias a lo que les envían familiares desde Estados Unidos”, indicó.
Otros países a los que han emigrado los garífunas hondureños es a Guatemala, Panamá y Belice.
También hay garífunas hondureños en España e Italia.
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Un ejemplo de la historia de migración, que se ha repetido miles de veces, es el garífuna hondureño Juan Aranda, quien a los 19 años salió rumbo a Estados Unidos orillado por no poder encontrar trabajo para suplir las necesidades básicas de su familia.
Cuando llegó a territorio estadounidense se unió al ejército, en el que estuvo 21 años.
Ahora es un militar jubilado del ejército de Estados Unidos y decidió volver a Tornabé, Tela, su pueblo natal, para poder contribuir al desarrollo de la comunidad.
“Nací aquí, me fui a Estados Unidos, donde estuve en el ejército de Estados Unidos, y hace ocho años volví. La gente como yo tiene que salir porque no hay fuentes de empleo. Si aquí se tuvieran oportunidades yo me hubiera quedado, pero no habían y no tuve opción”, recordó Aranda.
Ahora que volvió a Tornabé él ha comenzado un proyecto para alejar a los jóvenes y niños de los problemas. “Creemos que con el deporte podemos alejar a los muchachos de los malos pasos, pues muchos se meten en drogas y otros vicios. Por eso damos clases gratis. Hace como cuatro años se comenzó este proyecto. Ojalá el Gobierno apoyara más el deporte y los proyectos sociales en lugares como Tornabé, Tela, construyendo canchas y centros para entretenimiento sano de los muchachos”, dijo.
Aranda explicó que “cuando los niños o jóvenes se sienten parte de algo no buscan malas compañías en la calle” y detalló que les enseña la disciplina, palabras en inglés e insta a los niños y jóvenes a tener buenas notas y ser bien portados.
“Estos son los líderes del mañana y queremos formar buenos líderes. Es mi forma de aportar un granito de arena a un futuro mejor”, aseguró Aranda.
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Cómo bajar la emigración
Tenencia de tierras Es necesario resolver el problema de tenencia de tierras de las comunidades garífunas en el territorio hondureño para evitar que no queden familias enteras sin hogar y sin un lugar donde puedan desarrollar sus actividades de trabajo, como la agricultura.
Acceso a oportunidades Desarrollar programas sociales y dar más acceso a oportunidades de educación y trabajo a los jóvenes de las comunidades garífunas, y reducir el problema de inseguridad, evitaría que muchos de ellos se fueran al extranjero obligados por la necesidad.
Mujer garífuna El empoderamiento de la mujer garífuna también contribuiría de forma significativa a reducir la migración al extranjero. Es urgente impulsar programas a nivel nacional que permitan a la mujer garífuna tener oportunidades de desarrollo.
Comunidades garífunas Desarrollar la infraestructura de las comunidades garífunas para que estas tengan la oportunidad de desarrollar proyectos turísticos que estén a cargo de los propios miembros de las comunidades garífunas y tengan la oportunidad de generar ingresos.
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