El póster de búsqueda colgado en el sitio web de la agencia federal estadounidense aún indica que se había ofrecido una recompensa de 25 millones de dólares por cualquier información que condujera directamente a su captura o a su condena por la justicia.
En un comunicado el lunes, el FBI citó el tributo del presidente Barack Obama a 'los incontables profesionales de inteligencia y antiterrorismo que trabajaron incansablemente para alcanzar este logro'.
El líder máximo de Al Qaida y organizador de los atentados del 11 de septiembre de 2001 fue asesinado la noche de domingo al lunes en una operación comando de las fuerzas especiales de Estados Unidos en una localidad de Pakistán donde tenía su fortificado refugio.