Los transportistas están en alerta. Un posible aumento a los precios de los combustibles para el próximo fin de semana obligó ayer a la dirigencia a exigir al Gobierno, otra vez, el pago inmediato del bono de ajuste por combustible ofrecido a los taxistas.
También exigen la cancelación del último subsidio ofrecido a los dueños de los buses de los sectores urbano e interurbano y una solución definitiva al problema de los carburantes. Los transportistas amenazaron con plantear una nueva solicitud de aumento a las tarifas del transporte, al señalar que siguen siendo afectados por los costos de los combustibles y por la lentitud en el pago del bono de 2,300 lempiras en el caso de los taxistas, y del último subsidio, aún en proceso de negociación, que el Gobierno se comprometió a otorgar a los conductores de buses de los sectores urbano e interurbano.
Pagos
'El problema es que la situación aún no se resuelve; no se ha pagado el bono de ajuste por combustible al sector de los taxis y en cuanto a los interurbanos todavía no hay acuerdos y ya tenemos a la puerta el nuevo incremento de los combustibles', advirtió el presidente del Consejo Nacional del Transporte, Jorge López. Los transportistas no descartaron la paralización.
Los transportistas llegaron ayer a la Casa Presidencial a exigir solución al problema de los combustibles. Lanza dijo que hoy se pagará el bono de 2,300 lempiras a los taxistas.
Cifra
40 millones
De los 500 millones de lempiras que se dispusieron para subsidiar los aumentos quedan disponibles, según cifras dadas a conocer.
