Las diferencias sobre el cambio climático entre el Grupo de los Ocho países más industrializados (G-8) se agudizaron este lunes, luego que el jefe de la Comisión Europea hizo una convocatoria que dejó al presidente estadounidense George W. Bush en una postura aún más aislada.
Jose Manuel Barroso instó a los líderes de las naciones más ricas a dar los primeros pasos para reducir los gases de invernadero, durante el comienzo de la cumbre del G-8.
El cambio climático se avizoraba como uno de los temas más controversiales en la cumbre de este año y sería un objeto de debate el miércoles, cuando a los líderes del G-8 se les unan el presidente chino Hu Jintao y el primer ministro indio Manmohan Singh.
China e India señalan que los países más contaminantes en el mundo desarrollado deben ser la guía en la lucha contra el calentamiento global.
Pero Bush señala que las naciones en desarrollo deben tomar medidas iguales para hacer que cualquier acuerdo funcione, y ha mostrado poco interés en fijar metas sin esos países.
Esa postura fue criticada este lunes.
Barroso dijo que las naciones del G-8 deben llegar a sus propios acuerdos sobre las medidas de combate al cambio climático, en vez de adoptar la postura de: 'No haré nada a menos que ustedes lo hagan primero'.
El jefe de la CE dijo que esa postura no hace sino desencadenar un 'círculo vicioso'.
'Si estamos de acuerdo, tenemos una mejor posición para discutir con nuestros socios chinos e indios y con otros países', dijo Barroso.
Debido a sus grandes poblaciones y a sus economías de crecimiento acelerado, China e India son de los países que más emiten gases de invernadero, a los que se atribuye el calentamiento global.
China ha señalado que está lista para discutir el establecimiento de metas de mediano y largo plazo para reducir las emisiones de gases invernadero, y está abierta a negociar esos objetivos.
Pero Beijing no ha cambiado sus argumentos, según los cuales, la responsabilidad principal recae en las naciones desarrolladas. India ha prometido mantener sus emisiones por debajo de las que generan los países desarrollado, pero también quiere que esas naciones den el ejemplo.
Japón, el anfitrión de la cumbre de este año, ha destacado como tema principal del encuentro el cambio climático, y está apoyando a su aliado estadounidense en la búsqueda de conversaciones internacionales más amplias.
'Debería haber una percepción compartida de crisis sobre el cambio climático y, con base en eso, los líderes del G-8 acordarían la necesidad de una participación total de las principales economías', dijo Kazuo Kodama, portavoz de la cancillería japonesa.
El G-8, formado por Estados Unidos, Rusia, Francia, Italia, Alemania, Canadá, Gran Bretaña y Japón, representa alrededor de 40% de las emisiones globales de dióxido de carbono en la actualidad, de acuerdo con la organización ambientalista Greenpeace.
Noticia del día
El G8 busca “enfriar” precios del petróleo
Los líderes de las ocho principales potencias del mundo estudiarán desde hoy cómo enfriar los precios récord del petróleo y la temperatura del planeta, mientras miles de personas se manifestaban en su contra a 150 kilómetros de este remoto enclave del norte de Japón.
Los primeros líderes comenzaron a llegar a Japón el fin de semana, entre ellos el presidente estadounidense George W. Bush, para quien éste será su octavo y último G8 antes de dejar el poder en enero, y el presidente ruso Dimitri Medvedev, que se estrena en el club de los países ricos.
La cita, en un lujoso hotel frente al lago Toya tendrá lugar mientras el barril del petróleo se cotiza a un récord de más 146 dólares -más del doble que hace un año- y la carestía de los alimentos provoca protestas en el mundo en desarrollo, amenazando una economía mundial ya golpeada por la crisis 'subprime'.
Invitados
Los precios del petróleo continuarán cayendo debido a la caída del dólar, pronosticó ayer en Argelia el presidente de la Organización de Países Exportadores de Petróleo, Opep, Chakib Jelil, mientras Bush reafirmó en Japón la política estadounidense de 'un dólar fuerte'.
El presidente de China, Hu Jintao, estará en Toyako como invitado de la sesión sobre cambio climático del miércoles, al igual que los presidentes de Brasil, Luiz Inacio Lula da Silva, de México, Felipe Calderón, y otros líderes de economías emergentes.
Un masivo operativo de seguridad en el que participan 21 mil policías selló la isla de Hokkaido donde se celebra la cumbre y relegó a miles de manifestantes antiglobalización a la ciudad de Sapporo, a 150 kilómetros de Toyako, donde cuatro personas fueron arrestadas el sábado.
En Sapporo, unos activistas de la ong Oxfam vestidos con máscaras gigantes de los líderes del G8 y kimonos tradicionales sostuvieron un cheque gigante -y falso- por 50 mil millones de dólares para los países de Africa, una promesa realizada por el G8 en su cumbre de Escocia en 2005.
El G8 mantiene al parecer su promesa de duplicar la ayuda a África a 50 mil millones de dólares para 2010, adoptada en 2005, pero hasta ahora sólo ha desembolsado un 14% de esa cifra, dijo una fuente del grupo.
Otros puntos
Misa
El papa Benedicto XVI pidió ayer a los participantes en la cumbre en Japón que se preocupen de los poblaciones más pobres y frágiles.
Medidas
Los líderes del G8 quieren adoptar medidas concretas para enfrentar la crisis, que dispara la inflación mundial y agudiza la pobreza en el mundo.