TEGUCIGALPA
Donald Trump, presidente electo de Estados Unidos, ha ofrecido la importante cartera de secretario de Estado al senador cubano-estadounidense de Florida, Marco Rubio (de 53 años).
Citando a fuentes cercanas a Trump, el diario The New York Times señaló que esta decisión aún podría cambiar, pero parece probable la elección del senador.
Rubio, que habla un perfecto español, sería de gran apoyo para la política exterior de la administración Trump en relación con Latinoamérica y los objetivos estratégicos de Estados Unidos en la región.
El republicano de Miami fue elegido para el Senado en 2010 y ha mantenido una posición como halcón en política exterior, adoptando líneas duras sobre relaciones diplomáticas con China, considerando que esta nación es dirigida por un Gobierno “autoritario” y “genocida”, e Irán en particular, y manifestando una posición favorable a poner fin a la guerra entre Rusia y Ucrania.
Para unos sectores, Marco Rubio, un férreo anticomunista, es un aliado de la democracia hondureña, mientras que para otros él coincide con la línea de pensamiento de Trump y seguramente va a seguir con mano dura la visión de la política exterior del republicano.
En un comunicado de prensa de su oficina, divulgado el 15 de marzo de 2023, el político norteamericano expresó que en el mandato del presidente Joe Biden, los gobiernos de extrema izquierda en la región estaban recurriendo hacia “el régimen criminal y genocida de Pekín”.
Expuso que “cuando las personas en nuestro hemisferio se enfrentan a problemas reales como la violencia, las pandillas, el narcoterrorismo, la corrupción sistemática y los altos costos de vida la presidenta de Honduras (Xiomara Castro) se doble ante las demandadas del PCCh (Partido Comunista de China)”.
Asimismo, calificó de “vergüenza” que algunos países de la región sigan creyendo las mentiras de un régimen autoritario a expensas de su propia soberanía y seguridad.
Rubio fue otro de los altos políticos estadounidenses que condenó “la continua mano dura de Xiomara Castro en contra de la separación de poderes y el asalto de los colectivos de Libertad y Refundación (Libre) a miembros del Congreso Nacional, ocurrida en octubre de 2023.
Y además condenó la denuncia del tratado de extradición por parte del gobierno de Xiomara Castro, el cual ha permitido a Estados Unidos juzgar a capos hondureños en ese país.
Reacciones
Según Isaías Barahona, general retirado y exvicecanciller, si Donald Trump ya está señalando a Rubio como su próximo secretario de Estado probablemente es porque coincide en sus formas de pensar.
Eso hay que tomarlo en cuenta. “No es que va a venir a Honduras con una relación confrontativa. Ellos están de acuerdo que Honduras tenga una relación con China, pero no debe afectar la que se tiene con Estados Unidos”, expresó Barahona.
El exvicecanciller es del criterio de que el Gobierno hondureño y su diplomacia debe entender cuáles son esas líneas que Estados Unidos de alguna forma privilegia con este país. “No es inteligente pensar que la relación con China es más beneficiosa que la que se posee con Estados Unidos”. En China no “tenemos dos millones de hondureños. No le compramos porque no tenemos dinero y no nos compra mayor cosa porque no producimos. En cambio, con Estados Unidos tenemos un paquete comercial enorme que puede verse afectado desde el punto de vista estratégico y geopolítico”, advirtió Barahona.
Latinoamérica
Marco Rubio junto con otros senadores republicanos, como Carlos Jiménez, Bob Meléndez y María Elvira Salazar, han sido muy críticos del modelo cubano, venezolano y de algunas políticas del actual Gobierno hondureño, por lo que han recibido agrios ataques de la Cancillería, así como de funcionarios y asesores de Castro.
Como miembro ejecutivo, el secretario de Estado es la persona responsable de implementar las decisiones de política exterior del presidente y de asesorarle en los asuntos de interés internacional. Aparte de manejar las crisis internacionales, debe estar preparado ante lo inesperado en cualquier lugar del mundo.
Claves
1. Marco Rubio ejerció desde el Comité de Relaciones Exteriores del Senado una notable influencia en la política hacia Latinoamérica del primer mandato de Trump, pero algunos de sus asesores creen que su perfil de “halcón” contrasta con la política aislacionista de “Estados Unidos primero” que promueve Trump.
2. El nombre del senador ya se barajaba para liderar la diplomacia estadounidense, dado que estuvo en la lista de posibles vicepresidentes para un segundo mandato del republicano.
El analista Miguel Cálix señaló que, en caso de confirmarse, Rubio solamente será la expresión de una política exterior de Estados Unidos en la administración Trump. Estados Unidos tiene miradas y políticas institucionales de largo plazo que puede variar en los detalles y en las formas, pero sus intereses estratégicos siguen siendo los mismos.
Rubio será un operador de esa política y de las posiciones del magnate. “Él habla español, conoce bien la región, puede tener sus posiciones personales con ciertos tipos de gobiernos, pero él representa la gestión de un presidente. No es lo mismo el senador Rubio que el secretario de Estado Rubio”.
Dijo que “seguramente tendrá una influencia en la política exterior del país porque tiene una mirada clara sobre Latinoamérica y el mundo”.
Cálix consideró que la diplomacia hondureña tiene que tener claros tres puntos: “Primero, Estados Unidos es nuestro principal socio comercial. Dos, tenemos una importante comunidad migrante allá, por lo tanto hay que cuidar las relaciones porque Estados Unidos es un país que acoge a nuestros migrantes y de ahí vienen las remesas. Un tercer tema que tiene que ver con la defensa y la seguridad. Y ahí se incluye el narcotráfico y la posición geopolítica, clave e importante que Honduras tiene que atender”.
