Las actividades académicas y técnicas en la Escuela Agrícola John F. Kennedy se normalizaron después de días de lucha solicitando más atención de las autoridades del centro y del Gobierno en la reparación de edificios, talleres y laboratorios del área productiva.
El personal técnico y docente así como los estudiantes procedieron a reanudar las clases y dar un voto de confianza a las actuales autoridades para que puedan solventar la precaria situación que atraviesa la institución.
“Es necesario que se recupere la imagen que la escuela agrícola ha mantenido durante años a nivel nacional, y dejar atrás los conflictos para buscar soluciones inmediatas y brindar calidad en la educación”, dijo Rennis Avelar, director del la Escuela Agrícola John F. Kennedy.
Las pésimas condiciones de los dormitorios, edificios y la falta de apoyo en mejorar los trabajos de campo, obligó a los padres de familia, alumnos y docentes en el mes de febrero a tomarse las instalaciones, ya que no eran escuchadas sus peticiones por las autoridades gubernamentales.
“Estamos buscando mediante gestiones en el Gobierno obtener fondos que permitan la ejecución en la reparación de los edificios, además de que elaboramos un programa de fortalecimiento para el sector agropecuario, que consiste en la construcción de talleres y laboratorios productivos al igual que la dotación de herramientas para la agricultura”, agregó Avelar.
Asimismo, se desea conformar una sala de deportes para los estudiantes que están internos en la escuela, y a través de la Secretaría de Educación se van a mejorar los pabellones o dormitorios destinados a los estudiantes en el área de enfermería y cocina.
“Confiamos que el Gobierno pueda otorgar fondos para la construcción de los laboratorios y talleres del área productiva”, explicó el director.
