El nuevo sistema de medición instalado por la Enee en zonas residenciales donde hay altos consumidores, ya detectó la manipulación de dos medidores y el robo de otros dos aparatos considerados inteligentes. La alerta del ilícito tarda el mismo tiempo que hacer una llamada.
El gerente noroccidental de la Enee, Jacobo Da Costa, informó que en el instante mismo que los dos contadores fueron arrancados de su base y los otros dos trastocados, el servidor temporal ubicado en la Enee los detectó alertando al personal.
Da Costa sospecha que los aparatos fueron extraídos con la finalidad de conocer el funcionamiento del nuevo sistema instalado desde el mes de diciembre en el barrios Río de Piedras, en residencial Bella Vista y en la colonia Trejo.
“Han de estar tratando de conocer cómo funciona el sistema para ver de qué forma siguen defraudando al Estado, apuntó el funcionario.
Sanciones
La instalación de los nuevos medidores no representa ningún gasto para los usuarios, pero la situación cambia cuando el sistema se trata de violentar.
Da Costa explicó que en el caso de los medidores robados, los dueños de la propiedad deberán pagar el costo real de los aparatos. Cada uno asciende a 300 dólares o sea unos seis mil lempiras.
“El cliente los tendrá que pagar porque de manera automática les estamos dejando sin el suministro de electricidad hasta que nos digan quién se llevó los medidores”, señaló.
Da Costa informó que la Fiscalía los está apoyando en la investigación porque procederán por la vía penal y civil por el hurto de energía y por adulterar el nuevo sistema instalado. Los contadores robados estaban en unos apartamentos donde hay guardias de seguridad.
“Nosotros sabemos dónde está cada medidor. Todos se están dejando protegidos por parte de la Enee. Es responsabilidad del cliente cuidar su nuevo contador”, señaló.
Servidor
El cerebro que controlará los medidores inteligentes comenzará a funcionar el 20 de enero.
Esa misma fecha se instalarán en los barrios populosos y zona de los bordos, las cajas antifraude.
