Después de que la historia de Elmer Vásquez se publicara en Diario LA PRENSA, los gestos de solidaridad de pobladores de Copán, San Pedro Sula y Lempira no se han hecho esperar.
Al hospital Juan Manuel Gálvez han llegado ciudadanos de buen corazón para llevar pañales, leche y ropa que necesita el menor. Pero su tratamiento apenas comienza y se necesitan recursos para los medicamentos que se requieren por el proceso infeccioso que enfrenta ante la insuficiencia renal y el nivel avanzado de desnutrición.
Evolución
Han transcurrido cinco días desde la llegada del pequeño Elmer al hospital Juan Manuel Gálvez y el pequeño sigue sin tener movimiento. Su caso ha conmovido a todos aquellos que conocen su historia. Las fiebres continúan, pero las esperanzas asoman para dar un hálito de vida a este pequeño. Ayer se le practicaron exámenes que muestran que el nivel de glóbulos blancos ha mejorado notablemente y esto significa que el pequeño tendrá mejores defensas para enfrentar su mal.
Otra buena noticia que da alegría a las dos pediatras que lo atienden es que en estos cinco días Elmer ya aumentó una libra. 'Hay una vigilancia constante del niño. Su evolución va en proceso. Esperamos lograr su recuperación para estabilizarlo y hacer posible el traslado de Elmer a San Pedro Sula', afirmó la pediatra Yadira Cárcamo.
'Elmer no está en condiciones de hacer un viaje. Se tendría que esperar unos días para su traslado', manifestó.
Penoso
El caso de Elmer se viene a sumar a los muchos de este mismo tipo que se registran en comunidades pobres de todo el territorio nacional.
