El papa Benedicto XVI acusó a las sectas y al secularismo de ser 'fuente de confusión' para muchos católicos, en particular de los hondureños, tras recibir este jueves en el Vaticano a los obispos de ese país centroamericano.
'Como sucede en otras partes, la difusión del secularismo, así como el proselitismo de las sectas, es fuente de confusión para muchos fieles, y provoca además una pérdida del sentido de pertenencia a la Iglesia', lamentó el Papa ante los prelados hondureños, los cuales celebran la tradicional visita 'ad limina' cada cinco años al Vaticano.
En su mensaje, pronunciado en español, el pontífice invitó a la iglesia hondureña a seguir trabajando para ayudar a 'los más necesitados', a la vez que reconoció 'las enormes dificultades que se oponen a vuestra misión pastoral', dijo.
'Sé bien cuánto os aflige la pobreza en la que viven tantos compatriotas vuestros, junto al aumento de la violencia, la emigración, la destrucción del medio ambiente, la corrupción o las carencias en la educación, entre otros graves problemas', admitió el Papa.
Al dirigirse al cardenal Oscar Andrés Rodríguez Maradiaga, arzobispo de Tegucigalpa, Benedicto XVI elogió la 'intensa labor de ayuda a los necesitados' de la Iglesia de ese país, a la que exhortó a seguir mostrando 'el rostro misericordioso de Dios' con 'un extenso y capilar servicio de caridad, que llegue de modo especial a los enfermos, a los ancianos y a los encarcelados'.
El Papa recordó la visita celebrada por Juan Pablo II a ese país hace 25 años y enalteció el 'profundo espíritu religioso' de los hondureños así como las 'arraigadas prácticas de devoción popular', las cuales 'debidamente purificadas de elementos extraños a la fe', deben ser instrumento válido para el anuncio del Evangelio, aseguró.
