“Esto era como una cosa mágica; el dinero desaparecía por cienes y cienes y miles y miles en el aire, entonces sí es preocupante”, indicó la magistrada del Tribunal Superior de Cuentas, Daysi de Ancheta, al referirse a los 100 millones de dólares que entraron a las arcas del Estado y desaparecieron en la administración de Manuel Zelaya.
El dinero había sido donado por el Gobierno de Venezuela para mitigación de desastres a la Comisión Permanente de Contigencias, Copeco. En el informe que remitió el TSC al Ministerio Público se incluye el acta del ingreso de los 100 millones de dólares procedentes del pueblo venezolano, que de estos dos millones se invirtieron en compras ficticias y otros, con el pretexto de utilizarlos en labores de contingencia. “Hay 98 millones de dólares que no sabemos adónde están, desaparecieron, no dejaron absolutamente ningún rastro”, lamentó en declaraciones a la emisora HRN.
Para la magistrada “este tipo de acciones han enajenado al pueblo hondureño”.
“No se encuentran 98 millones de dólares. Dos millones fueron enviados a Comayagua para una compra ficticia y otros fueron depositados en cuentas personales”, confirmó.
Aseguró que existen evidencias claras de a manos de quién fue a dar ese dinero, por el que la Fiscalía deberá proceder.
“No se encontró realmente que estos 98 millones de dólares fueran depositados en una cuenta del Estado o que haya un funcionario público que los haya recibido, pues obviamente lo que podemos pensar es que están en bolsillos particulares”, cuestionó.
Latrocinio
“Creo que el pueblo se dará cuenta hasta dónde llegó y ha llegado el latrocinio que por décadas se ha hecho en este país”, dijo.
En el caso de Copeco, el TSC recomendó a la Fiscalía incoar las acusaciones ante los tribunales; por su parte el ente contralor estaría deduciendo acciones civiles contra ex autoridades de Copeco y otras entidades estatales, entre ellos Marco Burgos, ex comisionado de Copeco durante la administración Zelaya.
Igualmente, la funcionaria aclaró que fue una auditoría normal, ya programada, la que el TSC realizó en Copeco.
“No anda el Tribunal con cazabrujismos de ninguna índole y advierto esto por las reacciones que pudieran haber”, expresó.
El TSC se apresta a concluir otros informes sobre actos de corrupción cometidos en el gobierno de Zelaya.
Sobre la gestión interina de Roberto Micheletti dijo que no existe una denuncia, pero hay una auditoría que se realiza en Casa Presidencial próxima a concluir.
En total, el ente contralor maneja 13 informes sobre despilfarros en el gobierno de Zelaya, de los que no existe sustento legal.
Ni rastro
Sobre la escandalosa desaparición del dinero, Casa Presidencial asegura que no hay registros de que parte de la millonaria donación hecha por Venezuela haya ingresado a sus arcas, como lo indica la auditoría del TSC.
El gerente financiero de Casa de Gobierno, Wilfredo Cerrato, indicó por medio del departamento de Comunicación, que en los archivos no existe documentación relacionada a esos fondos. “Cuando se inició la gestión casi no se encontraron documentos de ningún tipo”, acotó el funcionario. De acuerdo al informe del TSC, Copeco recibió una donación de 100 millones de dólares de parte de la Alternativa Bolivariana de las Américas, Alba, pero solo hay registros del uso de 2 millones que luego se transfirieron a Presidencial, mientras que el destino de los 98 restantes es un misterio.
El TSC indica en su investigación que de acuerdo al contenido de un acta, firmada por varios funcionarios y personas particulares, el dinero sí ingresó a la contabilidad de Copeco. La auditoría del Tribunal abarca el período del 1 de enero de 2008 al 31 de agosto de 2009. La operación de la donación sucedió durante la gestión de Marcos Burgos al frente de Copeco, en el período del ex presidente Manuel Zelaya.
El actual comisionado de Copeco, Lisandro Rosales, también asegura que no tienen reportes de la millonaria transacción. Al iniciar su administración, hizo una revisión de los estados financieros de la institución y no encontró ningún indicio sobre la existencia de esos recursos, nada más un recorte de un periódico guardado en un archivo en el que se informaba de esa donación.
“Es importante que se aclare esta situación, porque si es dinero del Gobierno, se necesita; los órganos de investigación tienen que esclarecer este caso”.
En el acta 02-2009, punto 9, de la sesión ordinaria de Copeco del 16 de abril de 2009, consta que Venezuela dio los 100 millones, de los cuales 2 millones “fueron transferidos a una cuenta del Banco Central Copeco Emergencia Casa Presidencial número 1110220000078-7”.
“Al investigar los 98 millones (restantes) se observó en el acta que se desconoce el destino final de esos fondos, ya que sólo se especifica que se recibieron, pero no fueron depositados en ninguna de las cuentas de Copeco”, asegura el informe.
La auditoría del TSC también señala que Copeco hizo la compra ficticia de 973 quintales de frijoles, que reportó el grano como una compra y en realidad fueron donados por Francia. Este hallazgo se hizo luego de que auditores del TSC inspeccionaron un lote de 1,975 quintales de frijoles en el Ihma que había adquirido el organismo de socorro y corroboraron que 973 tenían el logotipo del gobierno francés. El TSC también detectó que el ex director administrativo de Copeco recibió 32 cheques de la institución que fueron depositados a una cuenta bancaria personal. El monto de las operaciones asciende a 1.2 millones de lempiras. Finalmente, el TSC probó que del presupuesto de Copeco se destinaron 150,000 lempiras a la Secretaría de Agricultura y Ganadería para compra de combustible para el funcionamiento de los 100 tractores donados por la Alba y 50,000 para un consultor que analizaría el terreno en donde funcionaría ese equipo. Cuestionó el Tribunal que la Ley de Copeco le prohíbe a esa institución hacer este tipo de operaciones.
“TSC debe ampliar auditoría al desvío de 98 millones”
Tegucigalpa. La Fiscalía contra la Corrupción coordina una investigación para deducir responsabilidades por la denuncia del desvío de 98 millones de dólares donados por el pueblo venezolano.
La investigación la inició la Fiscalía antes de que el TSC les remitiera el informe, dijo ayer el fiscal especial contra la Corrupción, Henry Salgado.
“El Ministerio Público ya ha efectuado diligencias sobre la denuncia del supuesto desvío de 98 millones de dólares. Vamos a pedir al TSC ampliar la auditoría”, dijo Salgado. La Fiscalía requiere que el ente contralor audite el génesis del recibo de los 98 millones de dólares y qué destino se le dio al dinero, ya que en el informe que se remitió no se especifica con claridad y carece de evidencia documental. “Producto del trabajo que hemos hecho, descubrimos que hay que hacer una serie de diligencias de auditoría que serán requeridas al Tribunal”, dijo.
Esta investigación la deberán profundizar los auditores del TSC en el Banco Central, Finanzas y Casa Presidencial. Esto porque no existe evidencia de que este dinero haya ingresado en el sistema financiero nacional.
Aseguró que la Fiscalía realiza una investigación seria sobre esta denuncia para llegar a la verdad y definir si se debe acusar por la malversación de caudales públicos. Ya se tomó declaración al ex viceministro de Gobernación, Ricardo Lara Watson, y el ex administrador de Copeco, Rigoberto Isaías Lara. Sin embargo, la Fiscalía requiere citar al ex comisionado de Copeco, Marco Burgos, para que detalle lo que sabe del dinero que se donó para la atención de contingencias por la tormenta 16. Burgos no ha sido citado porque la Fiscalía desconoce su domicilio.
