La instalación de antenas de telefonía celular en diferentes colonias y barrios de la ciudad mantiene preocupados a los progreseños, quienes temen que la radiación que éstas emiten perjudique su salud.
Los representantes de las empresas telefónicas responden que las acusaciones de los pobladores se deben al
desconocimiento sobre la radiación o al temor de observar las elevadas antenas próximas a su vivienda.
Enfermedades
Las antenas han provocado discordia entre los patronatos, que reclamen a las autoridades municipales porqué autorizaron la instalación de más dispositivos en el centro de la ciudad.
Decenas de progreseños alegan que según informaciones obtenidas en internet está comprobado que la radiación emitida produce diversas enfermedades, entre ellas cáncer en la piel, ceguera, esterilidad, tumores cerebrales, ansiedad y dolores de cabeza.
Protestas
“Estamos preocupados porque tenemos niños, ancianos y familiares enfermos que pueden ser afectados por la radiación celular y dentro de pocos años, casi todos estaremos enfermos”, señaló Daniel Marcía, vicepresidente del barrio Cabañas, quien al igual que otros pobladores se opuso a que se colocara otra antena más en el patio de uno de sus vecinos.
“No permitiremos la colocación de otra antena porque a cuatro cuadras de aquí ya instalaron una, no queremos ser afectados por la radiación”, dijo la pobladora Merle Cálix.
Hace tres semanas culminó la construcción de otra antena en la colonia 5 de Diciembre, los vecinos también protestaron, pero al final la permitieron con la esperanza de que la empresa telefónica les retribuya reparándoles las calles de ese sector.
Los colonos de la Fraternidad de la Paz también se quejaron frente a la alcaldía por otro dispositivo que colocaron en el centro de la comunidad. En una sesión de corporación, los ediles los aseguraron que no podían desautorizar la instalación de más antenas porque se trataba de un asunto de Estado.
“La protesta fue en vano porque al final la antena se instaló, sólo esperamos no vernos afectados con dolores de cabeza u otros males”, indicó la pobladora Vilma Zúniga.
La presidenta de la colonia Centroamericana, Alicia Suyapa Aguilera, dijo estar cansada de observar tanta antena en su sector.
Los pobladores de los barrios El Barro, El Bosque y El Castillo se unieron para impedir la instalación de otra antena.
El ex comisionado municipal, René Ordóñez, advirtió que de no detenerse la emisión de permisos para la instalación de antenas de telefonía celular en las zonas residenciales, los patronatos efectuarán plantones y marchas de protesta frente al palacio municipal.
'Hay mucho desconocimiento'
El gerente de proyectos del Departamento de Ingeniería de la empresa telefónica Tigo en Tegucigalpa, Marco Bonilla, indicó que su empresa utiliza tecnología de punta recomendada por la Federación del Centro de Comunicación de Estados Unidos, FCC y por reguladoras de la telecomunicación europeas.
“No está comprobado que las antenas produzcan enfermedades en la salud de las personas. Los vecinos desconocen del tema porque confunden las antenas de celulares con las de televisoras y radioemisoras, que utilizan 100 mil watts de potencia”.
Yalmer Pérez, del departamento de Ingeniería de Conmutaciones de la empresa Claro en San Pedro Sula, dijo que los rumores sobre las enfermedades todavía son un mito.
“A los que poseen marcapasos se les recomienda no utilizar celulares”, agregó.
