El conflicto en el Bajo Aguán se complica más. La comisión nombrada por el Gobierno falló. Ahora, el presidente Porfirio Lobo decidió dejar el problema en manos del ministro del Instituto Nacional Agrario, INA, César Ham, quien habló de expropiar si los empresarios no venden.
La situación es tan grave que los representantes de la Corporación Dinant anunciaron para los próximos días mil despidos más con los que sumarían 1,500, con los que ya se efectuaron.
El conflicto del Aguán empezó en diciembre de 2009 cuando un grupo denominado Movimiento Unificado de Campesinos del Aguán, Muca, invadió varias fincas en ambas márgenes del río Aguán.
Las tomas han dejado ya diez muertos por el conflicto, además de pérdidas millonarias por las tomas.
El ejecutivo de la Corporación Dinant, Roger Pineda, explicó que exclusivamente en lo que compete a la parte agrícola, las pérdidas cuantificadas por la toma desde diciembre a abril andan en unos cuatro millones de dólares, un equivalente a 80 millones de lempiras.
Pineda dijo que las pérdidas se van a incrementar en el segundo semestre del año porque la palma responde a un ciclo de cultivo, en la cual la temporada baja, es de enero a junio y la alta es julio a diciembre. Entonces las pérdidas serán mayores en estos meses que vienen, recalcó.
“También hay grandes daños en las propiedades que los campesinos retomaron tras firmar el acuerdo unilateral con el Gobierno. El otro extremo es por efectos de los salarios que se le estuvo pagando a la gente sin realizar labores por no poder ingresar a las fincas”.
El ejecutivo detalló que actualmente mantienen tomadas siete fincas conforme al arreglo del Gobierno.
“Es necesario separar dos extremos. El Gobierno les dijo a los campesinos que les iba a comprar tres mil hectáreas y el INA les adjudicó las tierras a su propia escogencia sin consultar con los propietarios. El INA con representantes del Muca escogieron las propiedades a su propio gusto, incluso, hasta propiedades urbanas; esas fincas suman 3,957 hectáreas en vez de las tres mil prometidas”, aseguró.
Siguen las tomas de finca
El representante de la compañía informó que posterior al arreglo logrado el 17 de abril, disidentes del Muca también invadieron una finca llamada Bajo Aguán que es de 1,111 hectáreas.
“Son personas que no están de acuerdo de cómo se están manejando las cosas dentro del movimiento campesino y decidieron separarse tomándose la plantación. Otro grupo se ha tomado 700 hectáreas de la finca El Tumbador y eso totaliza 5,780 hectáreas”.
Prosiguió: “Hemos pedido al INA que nos ayude a desalojar las dos fincas que se han tomado de último, pero sin resultado”.
A la fecha, las fincas que están tomadas son La Concepción, La Isla uno, La Isla dos, Marañones, Lempira, Aurora y La Confianza, lo que suma 6,957.69 hectáreas.
Pineda sostuvo que la tierra trabajada no debe ser sujeta a invasiones con la bendición del INA.
Informó que las tierras nunca han estado en venta y se aceptó hacerlo por una petición especial del presidente Porfirio Lobo al propietario de Corporación Dinant, Miguel Facussé.
“A petición del Presidente se accedió a vender las tres mil hectáreas y la Corporación Dinant nunca fijó un precio de sus tierras, sino que lo fijaron en el Gobierno. Es interesante revisar los antecedentes donde la subsecretaria del INA dijo que eran 750 millones de lempiras por tres mil hectáreas”.
Señaló que la cifra de 282 millones de lempiras no es aceptable por la Corporación. Pineda dice que la empresa no sólo es productora de fruta, sino que transforma la fruta para productos terminados y se han hecho inversiones millonarias para industrializarla.
Para los próximos días se esperan otros mil despidos porque ya no pueden sostener los gastos. Hace varios meses se entregaron 500 sobres. “Estamos dispuestos a renegociar, pero con seriedad”.
¿Expropiación?
Por su parte, César Ham informó que el gobierno ha tenido tres reuniones con Facussé en un intento por llegar a un acuerdo sobre el precio por hectárea cultivada de palma africana, pero no ha habido ningún acuerdo porque “quiere que le compremos las tierras a valores estratosféricos... Está solicitando 750 millones, cantidad que consideramos totalmente sobrevalorada y fuera de la realidad de lo que valen esas plantaciones y sus tierras”, dijo.
Dijo que, según el avalúo que ha hecho el gobierno, con el apoyo de técnicos especializados, “nos arroja una cantidad de 282 millones” (80 mil lempiras por hectárea) y el inversionista está demandando 250 mil por hectárea.
“Estamos agotando la instancia del diálogo, pero si no hay voluntad del señor Miguel Facussé, sin lugar a dudas, tenemos que ir pensando en otras formas de poder aplicar la ley y poder en definitiva expropiar estas tres mil hectáreas”, advirtió el martes.
Tras su regreso de Sudáfrica, el designado presidencial Samuel Reyes dijo que el conflicto del Bajo Aguán será manejado exclusivamente por Ham.
Reyes fungió como coordinador de la comisión para solucionar el conflicto. “Yo ya me desconecté del tema, según el acuerdo firmado ya dejé de coordinar lo del Bajo Aguán, ahora todo es manejado por el director del INA, César Ham”, reiteró.