El elevado índice deficitario de viviendas, generado por el incremento de la inmigración, mantiene preocupadas a las autoridades y fuerzas vivas porteñas.
La alcaldía predice la llegada de más hondureños que se radicarán en esta ciudad atraídos por el movimiento comercial que generará el tráfico de unidades pesadas con el canal seco y la esperada tendencia de crecimiento del puerto con la apertura del Tratado de Libre Comercio, TLC.
Registro
Puerto Cortés se ha convertido en una de las ciudades más importantes de Honduras al alcanzar uno de los mejores índices de desarrollo municipal durante las últimas décadas, actualmente cuenta con una población aproximada de 115 mil habitantes.
Los estudios revelan que una gran parte de los inmigrantes hace su vida en casas de alquiler y otros en condiciones inadecuadas, señala el Consejo Municipal de Viviendas para Puerto Cortés.
El presidente del Consejo, Ricardo Carvajal, detalló que el déficit habitacional para los porteños oscila entre las ocho y 10 mil casas.
Por ello, este domingo el Consejo realizará en diferentes sectores del municipio, una jornada de registro sobre la necesidad de viviendas, tanto en el sector de la península como en el área urbana.
“Aunque sostenemos que el déficit habitacional es de unas 10 mil casas, sabemos que con el registro a levantar la cantidad podría variar, puede que sea más porque sabemos de la necesidad de viviendas”, indicó Carvajal.
El dirigente recordó que durante años los diferentes gobernantes han prometido a los porteños la construcción de viviendas, pero las promesas quedaron en el aire; sin embargo, en esta ocasión esperan que con el programa de Vivienda Ciudadana y Crédito Social el Gobierno pueda asignar fondos a los pobladores más pobres que urgen de una residencia digna.
La municipalidad se suma a la causa para negociar terrenos a fin de construir viviendas.
El gerente municipal de Planificación, Diego Méndez, indicó que Puerto Cortés se suma a las ciudades de mayor desarrollo en Honduras y que la construcción del canal seco hasta Puerto Cortés, los tratados del Plan Puebla Panamá, entre otros, que están en proceso de ejecución, son atractivos para la gente y por eso la inmigración es grande cada año.
“Si desde ahora no nos organizamos para obtener más viviendas, dentro de pocos años Puerto Cortés será un desastre”, recalcó el funcionario.
Méndez dijo que la mayoría de los inmigrantes no tienen donde vivir dignamente, “la mayoría viene a alquilar en lugares donde las condiciones de vida son deplorables, por eso debe buscarse contar con mejores soluciones habitacionales”.
Otra de las preocupaciones es que los servicios básicos también se vuelven insuficientes y temen que se agrave el problema del agua potable.