Alvaro Colom, un ingeniero industrial reconvertido a la política, asume este lunes la presidencia de Guatemala con la promesa de crear un país 'socialdemócrata con rostro maya'.
Fueron precisamente los pueblos indígenas, que representan casi la mitad de los 13 millones de habitantes de Guatemala, los que le permitieron a Colom, quien ostenta además el cargo de sacerdote maya, ganar en 20 de los 22 departamentos del país.
Conocido como 'gavilán', su 'Nahual' maya, equivalente al signo del zodiaco occidental, Colom, de 56 años, buscará impulsar un gobierno 'socialdemócrata' para que los pueblos autóctonos salgan de la pobreza, la marginación y discriminación a las que han estado sometidos desde hace siglos.
'Quiero decirle a la población que mi gobierno impulsará la equidad, la diversidad cultural y la tolerancia. En mi gabinete no hay racistas ni machistas. No importa quién gobierna, sino para quiénes y cómo se hace', afirmó Colom este domingo en una entrevista.
Con esas declaraciones, el futuro gobernante sale al paso de las críticas que le ha acarreado el nombrar sólo a una mujer y a un indígena en los 13 ministerios que integran su equipo de trabajo.
Además, sus detractores lo acusan de falta de liderazgo y de haber permitido en su partido -el mayor del país con 80.000 afiliados- la presencia de agentes del crimen organizado Incluso lo ven como un pelele de su impulsiva y enérgica esposa, Sandra Torres, quien, aseguran sus detractores, controla una facción del partido Unidad Nacional de la Esperanza (UNE).
Sus seguidores, sin embargo, refutan estas críticas porque ven en él a un líder que ha ido ganando experiencia tras dos intentos previos de llegar a la Presidencia, forjándose como político de raza tras sus experiencias como empresario y funcionario público.
La tendencia socialdemócrata de Colom levanta ampollas en una sociedad conservadora y un sistema económico del que sólo se benefician un puñado de poderosas familias, mientras más de la mitad de la población vive en la pobreza, sobre todo los 23 pueblos indígenas que conviven en esta nación.
Ni su pasado empresarial como directivo de la maquila, ni su paso por el Ministerio de Economía como viceministro, en 1991, en el gobierno de Jorge Serrano Elías, han logrado tranquilizar al empresariado local, inquieto por sus intenciones.
Sobre todo porque Colom ha declarado que pondrá fin a sus privilegios, como exoneraciones fiscales, bajos salarios, flexibilidad laboral, políticas de salvataje financiero, evasión fiscal y debilitamiento del sindicalismo.
También se ve con recelo la elección de Colom del prestigioso cardiólogo Rafael Espada como su vicepresidente, con el que comparte la misma inclinación por los temas sociales y el afán por mejorar el deplorable sistema de salud pública.
El nuevo presidente guatemalteco Álvaro Colom enfrentará una serie de desafíos. Delegados de más de 70 países asistirán a la investidura de mañana
Listo para asumir el poder
Todo está preparado en Guatemala para la toma de posesión de álvaro Colom como presidente para los próximos cuatro años, durante los cuales ha prometido reducir la pobreza, frenar la violencia y sacar a los pueblos indígenas del ostracismo al que han estado condenados en los últimos siglos.
Y mientras los encargados de protocolo se aprestan para recibir a unas mil 500 personalidades de 70 países, entre quienes se incluyen 11 jefes de estado y el Príncipe de España, Felipe de Borbón, así como 10 cancilleres, las fuerzas de seguridad ejecutan ya los dispositivos correspondientes para resguardarlos.
'Las zonas 1, 4, 9 y 10, centro, se encuentran en un estado de máxima seguridad pues los operativos, coordinados con la Secretaría de Asuntos Administrativos y de Seguridad de la Presidencia, el Ejército y la Policía de Tránsito ya están en marcha', afirmó el comisario Henry López.
López, director general adjunto de la Policía Nacional Civil, PNC, de Guatemala. También explicó que los puntos donde habrá mayores restricciones están en los alrededores del aeropuerto La Aurora y los hoteles donde se hospedarán las delegaciones, así como en los contornos de la Plaza de la Constitución. Y es que éstos serán los puntos principales en los que se desarrollará la toma de posesión de Colom, el hombre que gobernará Guatemala durante cuatro años, 2008-2012, período durante en el cual se centrará en combatir la pobreza, la violencia y el racismo.
La pobreza, según datos oficiales, afecta al 51 por ciento de los 13 millones de habitantes de

Este grupo de policías inspecciona permanentemente el lugar donde se quedarán las delegaciones internacionales.
Planificación
El plan de gobierno de Colom contempla mejorar las precarias condiciones de vida de los sectores mencionados, con medidas que tendrían que comenzar a implementarse durante los primeros 100 días de su administración.
Además, el socialdemócrata tendrá que enfrentar la inseguridad rampante que se cobra un promedio de 16 muertes diarias, convirtiéndolo en uno de los países más violentos del continente americano.
Colom anunció fuertes medidas para combatir ese flagelo, incluso prevé que con éstas haya un recrudecimiento de la violencia, pero aún no anunció quiénes serán los titulares de las carteras de Defensa e Interior, encargadas de contrarrestar la violencia y el crimen organizado que socava el Estado de derecho.
El fin del bigote
Después de más de cuatro décadas de reinado, el bigote presidencial tendrá su fin mañana cuando Álvaro Colom se ponga la banda presidencial. La seguidilla del mostacho se inicia en 1966 y concluye este año pasando por régimenes militares, golpes de Estado y el reinicio de la democracia en 1986.
La dinastía del bigote presidencial al parecer tenía que morir este año, pues los dos candidatos que disputaron la segunda vuelta electoral, el 4 de noviembre pasado, carecía de él, mientras que en la primera vuelta, setiembre, sólo dos de los 14 candidatos lo lucían con orgullo. Colom llegará a imponer su estilo y terminar con 10 ex jefes de Estado electos en comicios, dos ex dictadores y una junta militar, aunque en ella sólo uno, el ex general retirado Efraín Ríos Montt, lucía el mostacho.
Durante esos 42 años de historia, el bigote estuvo presente en siete militares, incluidos dos por golpes

La Policía y los militares inspeccionan diferentes lugares para evitar cualquier atentado o hecho violento.
Cambios no serán radicales
Ciudad de Guatemala. álvaro Colom está a punto de tomar posesión como presidente de Guatemala y poner en marcha un plan de emergencia de cien días; pero advierte que los cambios en este país 'conservador' no pueden ser radicales.
'Como presidente estoy consciente que los cambios tienen que ser firmes pero graduales y que no se pueden dar cambios radicales. Guatemala es un país conservador y tradicional, y queremos el cambio, pero queremos un cambio sin más violencia', dijo ayer en una entrevista a la AP. 'Otra metodología llevaría a la confrontación y la polarización que es lo que queremos evitar', señaló.
Colom tomará posesión mañana y se convertirá en el primer presidente socialdemócrata en los últimos 50 años en Guatemala.
Aunque el 46% de los guatemaltecos cree que el nuevo gobierno mejorará la situación del país. La llegada de un presidente de centro izquierda ha levantado preocupaciones entre los sectores más conservadores.<